Obispo de SJM llama a proteger la familia como «eje principal de la sociedad»

Obispo de SJM llama a proteger la familia como «eje principal de la sociedad»

SAN JUAN DE LA MAGUANA.- El  obispo de la diócesis de aquí, monseñor Tomás Alejo Concepción, advirtió que la principal prioridad del Estado debe ser la protección de la familia, “por ser el eje principal del desarrollo de una sociedad”. 

“La familia tiene 4 cometidos, 4 ejes básicos: la formación de una  comunidad de personas, el servicio a la vida, la participación en el desarrollo de la  sociedad y la participación en la  vida de la Iglesia”, precisó el religioso. 

Y más adelante, la máxima autoridad católica de las provincias de Azua, San Juan y Elías Piña, monseñor Alejo Concepción, apuntó:

“Por esos motivos y otros no menos importantes, la  familia siempre y tiene, tiene que ser la primera institución que el Estado dominicano debe proteger y velar para que ella funcione como lo que es y debe ser, la escuela de amor, de valores, en la que la sociedad se siente, tanto  en el  ámbito cultural, como político, social, económico, religioso, porque ella es la formadora de los ciudadanos de cada generación”. 

Esas y otras expresiones las hizo el obispo monseñor Tomás Alejo Concepción durante un masivo acto celebrado en las instalaciones del recinto de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, UASD,  para conmemorar 30 años de la Fundación para el Desarrollo de Azua, San Juan y Elias Piña-FUNDASEP         -, con la presencia de las principales autoridades de dichas provincias, los tres senadores, Lía Diaz, y Félix Ramón Bautista Rosario e Iván Lorenzo. 

También el obispo emérito, monseñor José Dolores Grullón Estrella, la gobernadora provincial, Elvira Corporan de los Santos, Ana María Castillo, directora regional de Gestión Presidencial, y el diputado Nidio Encarnacion. 

Alejo Concepción exhortó todos los sectores sociales del país a colaborar en la medida de las posibilidades de cada quien, “para que visamos en  paz, tranquilidad y armonía y que colaboran  también con la pastoral familiar, porque el fin y al cabo, República Dominicana es de todos y todas”. 

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