Yamira Taveras 
El obispo emérito de la Diócesis local, monseñor Antonio Camilo González, declaró ayer en la misa por el Día de las Mercedes que la corrupción que golpea al país es como el mal aliento, que todo el mundo sabe que lo padece pero el que lo tiene no se da cuenta o no le importa.
Al hablarle a los feligreses durante la homilía, explicó que es bueno fijarse en eso, porque la gente habla de que aquí no hay nada, que no se ha hecho nada, que aquí nadie ha cogido nada, y la población entera sin nada y un grupito con todo.
“Es bueno hacer esta comparación, porque al que le hiede la boca todo el mundo se da cuenta menos el que la tiene, y así son los corruptos, todo el mundo sabe que ellos se lo llevan todo, pero ellos nunca hacen nada, nada, nada”, dijo.
Sustentó que sería bueno que sea uno mismo que se dé cuenta de sus fallas, que no lo tenga que decir otro y que me tenga que señalar otro por no tener una conciencia suficientemente libre para escuchar la voz de Dios.
Explicó que ya es hora de construir un país que sea Patria y que sea casa para todos.
La raíz. González mantuvo que la falta de leyes justas y que se impongan a todos por igual es y será siempre la raíz de todos los males sociales que existen en República Dominicana.
En ese sentido, aclaró que siempre han aparecido hombres que no se marchitan con nada y a quien no compraron su conciencia con nada, como Juan Pablo Duarte, San Ramón Nonato, entre otros.
El sacerdote manifestó que en estos momentos es necesario crear leyes que respondan a la realidad del país, que garanticen la armonía y que se puedan superar los conflictos.
“Se necesitan leyes justas, que puedan garantizar la armonía y superar lo cumplido sin olvidar que la inequidad y la impunidad son las raíces de todos los males sociales”, observó.
Dijo que no crean que tapando las cosas se van a solucionar esos males y que salimos a hablar, tapando, tapando y tapando todo. Pidió no olvidar que todos somos necesarios para crear y formar la sociedad. Esa no se hace sola.
En la eucaristía estuvieron presentes el gobernador Bolívar Marte; el alcalde de La Vega, Kelvin Cruz, y el diputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Fausto Ruiz; el presidente de Partido Dominicanos por el Cambio, Eduardo Estrella, entre otras personalidades.
