POR SANTIAGO GONZALEZ
SANTIAGO.- El presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano reclamó ayer del gobierno «dejar de estar tirando la pelota» a las próximas autoridades, sobre la grave crisis eléctrica que actualmente vive el país, tras sostener que el presidente Hipolito Mejía, todavía tiene la responsabilidad sobre ese problema.

Monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio afirmó que los sectores involucrados en la producción, distribución y suministro energético, también están obligados a buscarle una solución urgente a esa situación.

«Hay que decir que no se puede estar tirando la pelota, hay que decirlo así en el lenguaje nuestro, dejando que eso quede para el próximo gobierno que es quien tiene que resolver», manifestó el dignatario.

Sostuvo que la solución de la actual crisis energética  no puede dejarse para dentro de un  mes, ya que los apagones no pueden seguir sumiendo a la nación en un caos y un desorden, «porque alguna respuesta tiene que haber».

Su llamado lo dirigió a todos los sectores que intervienen en el suministro de electricidad, por estimar que todos tienen una responsabilidad grande frente al país.

En declaraciones a HOY, monseñor De La Rosa y Carpio manifestó que aunque el tema es reiterativo y sobre él se viene hablando hace años, se les reclama a las autoridades «una solución» y que los gobiernos tienen que explicar qué pasa y  por qué no hay respuesta a este mal.

«En este momento, eso ha llegado a un estado de deterioro tan grande que uno tiene que felicitar al pueblo dominicano por la paciencia que ha tenido con los gobiernos», afirmó el prelado.

Dijo esperar que las protestas que se realizan en contra de los apagones, no se extiendan y se le busque una solución a la problemática a la mayor brevedad, porque los pobladores están desesperados.

Indicó que la energía eléctrica es básica para cualquier pueblo hoy día, «porque cuando uno visita un país en el extranjero ve que su desarrollo lo tienen sobre la base de la electricidad y más los dominicanos que viven del turismo y las zonas francas”.

El prelado entiende que sólo el hecho de que esos sean los pilares económicos del país, es una razón lo suficientemente poderosa como para entender que hay una competencia grande que podría sacar al país del mercado.

«Pero, además están las medianas y pequeñas industrias que necesitan vivir de esto. Pero la parte más sensible es la parte humana, un pueblo que reclama un poco de energía para vivir dignamente», reiteró el religioso.

La falta de hielo en los hogares, de un abanico encendido y las demás comodidades que el Todopoderoso ha puesto al servicio del hombre, son elementos que no pueden ser prohibitivos para los dominicanos, por capricho de quienes gobiernan, estimó monseñor De la Rosa y Carpio.

LOS RICOS

Sobre la renuncia de algunos sectores pudientes para contribuir con el pago de los impuestos, el prelado dijo que como pueblo cristiano, es necesario tocar el tema de la redistribución de las riquezas, porque hay una cultura de evasión de impuestos, ya que aunque algunos pagan fielmente, otros no lo hacen.

Manifestó que en las actuales circunstancias que vive el país, en la redistribución de las riquezas tienen que tener una gran participación quienes tienen más y les advirtió que si no pagan sus impuestos como deben, más tarde que temprano pagarán las consecuencias.

Criticó el proyecto de reforma fiscal, asegurando que lo que parece es una reforma tributaria y que lo que el país necesita es una reforma fiscal a fondo.

Aseguró que hay temor de que los políticos administren mal los recursos provenientes de los impuestos y que hay que desterrar esa creencia.

 LA CRISIS

Ayer, diversas poblaciones del Cibao permanecían apagadas, mientras crecía el temor de los sectores productivos, de que pueda generarse «el colapso total», por falta de energía.

“Producir en las empresas en las actuales condiciones es una locura, con el desplome del servicio eléctrico que aquí sólo se produce dos horas diarias de ese servicio”, consideró ayer la directora ejecutiva de la Asociación de Industrias de Zona Franca, licenciada Josefina Hernández.

Declaró a HOY que varias empresas han dejado de laborar en sus horarios nocturnos, por la seguridad del personal y para mantener sus plantas de emergencia para el horario diurno.

El ingeniero Rafael Genao, de la Corporación de Asfalto, dijo que el país tiene un grave problema en la electricidad que requiere de acciones urgentes porque en sus empresas también podrían paralizar sus actividades y hasta tener que despedir el personal si ello continúa.

Barrios de la parte norte de esta ciudad y poblados de Santiago Rodríguez, Mao y Moca han paralizado sus actividades en protesta por la falta de electricidad.