Por FIOR GIL
HIGUEY.-El obispo de la diócesis de La Altagracia, Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, llamó ayer a los dominicanos a trabajar por un proyecto de nación en el que participen todos, sin importar la tendencia política, para lograr el desarrollo del país.

Peña pronunció la homilía del día de la Altagracia.

El prelado, hablando con motivo del Día de la Altagracia, con la asistencia del presidente Leonel Fernández, monseñor Peña Rodríguez dijo además que el pueblo dominicano pide a gritos rectitud y honestidad en el manejo de los intereses públicos, porque la transparencia es el bien más eficaz y preventivo contra la corrupción.

Llamó a los dominicanos a participar activamente en las elecciones congresuales y municipales del 16 de mayo, pero advirtió que deben ser celosos al elegir los candidatos y dar su voto a aquellos que en realidad se preocupen por el bien de las mayorías y que busquen la solución a los problemas de la nación.

«Debemos aspirar a un proyecto de nación donde todos, no importa la tendencia política, trabajemos para lograr el desarrollo de la nación, y no enfrascarnos en luchas estériles, donde predominan los insultos y diatribas que no conducen a nada, a no ser a la división entre los hermanos», subrayó.

Manifestó que el país exige una respuesta adecuada a los problemas de educación, económico, de trabajo, de vivienda y de medicina que tanto nos agobian.

Monseñor Peña Rodríguez expresó que los dominicanos debemos además luchar por el bien común frente a la corrupción egoísta, la defensa de la vida frente a la cultura de violencia y la muerte, así como fortalecer las familias frente a la práctica de leyes sociales que corroen el fundamento primordial de la sociedad.

Pidió también la aplicación justa y valiente de la ley en los tribunales frente a la impunidad y soluciones legales ante la creciente inmigración ilegal haitiana y de otros países.

«Como cristianos debemos comprometernos con coherencia de vida y acción a la transformación de los sistemas políticas, económico, sociales y culturales que mantienen en la miseria material a millones de dominicanos.

Exhortó a los empleados públicos y a los candidatos políticos a tomar conciencia de lo que significa desempeñar un cargo que le ha sido dado por el pueblo y no para trabajar por los propios intereses o por los intereses de su partido, porque «a veces s da la impresión que la parcela política a la que se pertenece está por encima de la nación».

Monseñor Peña Rodríguez también reflexionó sobre el tema del Tratado de Libre Comercio y llamó a las autoridades a que tomen medidas adecuadas en favor de los sectores más vulnerables, especialmente el agrícola, laboral y salud.

Observó también que el país no se debe descuidar con el sector turismo, por lo que solicitó que se preparen las infraestructuras necesarias para que cada día, los turistas se sientan más atraídos.

A la misa, celebrada en la Basílica de Higuey, además del presidente Leonel Fernández, su esposa la doctora Margarita Cedeño de Fernández y funcionarios del gobierno y diplomáticos, asistieron, las autoridades civiles y militares de la provincia, empresarios y funcionarios del gobierno, así miles de personas de todas partes del país los cuales veneran a la Virgen de La Altagracia.

EL HIMNO NACIONAL

Por primera vez se innovó en esta ceremonia con la  interpretación del himno nacional, a cargo de la banda de música de la Fuerza Aérea Dominicana, en el momento de la bendición del caliz, también el cantante Niní Cáffaro interpretó la canción «Cuando pase por Higüey», compuesta por Rafael Solano, dedicada a Higuey cuando se fundó la Basílica. Le acompañó el Coro de la catedral, dirigido por el maestro José Delmonte.

Miles de fieles haitianos devotos de la Virgen de la Altagracia acudieron al santuario para en el ceremonial, principalmente a la misa oficiada en creole para los peregrinos del vecino país.

Esta misa tuvo lugar a la 1:00 de la tarde, luego de terminada la misa solemne presidida por monseñor Nicanor Peña, quien antes de salir del prebisterio agradeció la presencia del presidente Fernández, de la primera dama, Margarita Cedeño de Fernández, de las secretarias de Educación Superior, Ligia Amada Melo, y de Educación, Alejandrina Germán, Alejandro Grullón, gobernador de la Basílica y su esposa Melba de Grullón y del Maestro Solano, Nini Cáffaro, el maestro José Delmonte y el coro de la Catedral.

A las 4:45 de la  tarde miles de fieles participaron en la solemne procesión por las calles de esta ciudad con la imagen de Nuestra Señora de La Altagracia, presidida por el obispo Peña Rodríguez y que fue organizada por las damas y caballeros de La Altagracia, el cuerpo de Bomberos, Club de Leones y acompañada por la Banda de Música de la Fuerza Aérea Dominicana.