Obispo reconoce trabajos militares en el Día de San Miguel

Obispo reconoce trabajos militares en el Día de San Miguel

Santiago.- El obispo de la Diócesis de San Francisco de Macorís, monseñor Jesús María de Jesús Moya, resaltó hoy el esfuerzo realizado por las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional para combatir la violencia, el crimen organizado, el narcotráfico, y toda violación a los derechos humanos, “incluso a costa de su propia vida”.

Al pronunciar la homilía en la Segunda Brigada de Infantería del Ejército Nacional, en esta ciudad, con motivo de celebrarse ayer  el Día de San Miguel Arcángel, patrón del Ejército, el obispo destacó la labor de los militares para preservar los derechos institucionales por la promoción del respeto y la salvaguarda de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario.

“El militar y el policía son verdaderos patriotas entregados y sacrificados. Tenemos mucha limitaciones en los pueblos, todos nuestros grupos y clases tienen limitaciones, pero tenemos una Fuerzas Armadas muy sacrificadas y eso hay  que alabarlo por el esfuerzo que hacen”, expresó.

El religioso aconsejó a los militares que cambien de profesión, que busquen coordinación y asesoramiento,  y se dediquen a otra cosa, si no eligieron bien cuando aceptaron pertenecer a las Fuerzas Armadas.

Durante la misa, monseñor De Jesús Moya bendijo la imagen de San Miguel Arcángel, además las instalaciones de la Segunda Brigada del Ejercito la cual esta totalmente remozada  y exhortó a la ciudadanía a amar a los cuerpos armados dominicanos.

La actividad fue encabezada por el Secretario de las Fuerzas Armadas, teniente general  piloto Pedro Rafael Peña Antonio, el jefe de de Estado Mayor del Ejército,  mayor general Joaquín Virgilio Pérez Feliz, y el comandante de la  Segunda Brigada de Infantería, general Fernando Valerio, general de brigada Manuel Perozo Castillo

El Jefe de Estado Mayor, mayor general Pérez Feliz  durante su discurso destacó la labor de remozamiento de la fortaleza Fernando Valerio.

Enfatizó que el trasladado de la festividad del Ejercito Nacional a esta ciudad es una  deuda histórica con el primer Santiago de América, cuna de la batalla del 30 de marzo de 1844, considera por los historiadores la salvadora de la República, donde se logró una victoria militar y un triunfo político.

La actividad fue aprovechada por el comandante de la Segunda Brigada, Perozo Castillo, para entregar unas replicas de San Miguel Arcángel, al Secretario de Las Fuerzas Armadas, al Jefe de Estado Mayor, al  obispo De Jesús Moya y al Jefe del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI) Mayor General  Ramón Antonio Aquino García.

Asimismo, fueron reconocidos durante la ceremonia el síndico José Enrique Sued,  el ex gobernador Marcelo Bermúdez, los empresarios Mícalo Bermúdez, Félix García, Manuel Estrella, Fernando Capellán y José Clase.

También, Rafael Caraballo, Yeyo Ochoa,  Raudy Torres, Arquímedes Cabrera,   Rubén Reynoso y el general de brigada Rubén Paulino Sem, pasado comandante de la Segunda Brigada.

Entre los oficiales presentes estuvieron el Sub Secretario de las Fuerzas Armadas, mayor general  Gilberto Delgado, el director de la Policía en el Comando Cibao Central, general Eduardo Alberto Then, mientras que entre los funcionarios civiles se encontraban la gobernadora Nidia Bisonó, el cónsul en Juana Méndez, Haití, Santiago Caba, así como empresarios y comerciantes de la ciudad.

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