El obispo de la diócesis de esta ciudad, monseñor Santiago Rodríguez, se mostró de acuerdo con que los extranjeros que se encuentren en el país sean regularizados, tal como lo establece la Constitución.
Consideró que el trabajo de las autoridades debe encaminarse en exigir que se normalice el estatus de los extranjeros que tienen sus documentos para que luego no se diga que se les maltrata, que le quitan oportunidades y que no se les da lo que les corresponde.
Señaló que para muchos países un indocumentado constituye un delito federal, por lo que se hace necesaria la documentación de los extranjeros, ya que el país no puede seguir con tantas personas indocumentadas.
El obispo Rodríguez entiende que esto debe ser aplicado también con los propios dominicanos, debido a que en el país existen muchas personas sin declarar y que no cuentan con documentos.
“Es necesario que el ciudadano se sienta un ente social, útil, que represente un número de la población del país”, expresó el prelado católico.
Dijo que es fundamental que se le exija y se trabaje en la documentación de los tantos ilegales que hay en nuestro país.
La Dirección General de Migración (DGM) continúa trabajando con la segunda etapa del Plan Nacional de Regularización de Extranjeros (PNRE), que comprende a la categoría de no residentes, para que puedan renovar o cambiar de estatus migratorio.
Decenas de haitianos acuden a la Gobernación de esta ciudad con la finalidad de regularizar su situación migratoria pero se quejan por la falta de orientación por parte del personal de Migración ya que tienen que dar muchos viajes y gastar el poco dinero que consiguen, debido a que muchos viven en comunidades lejanas.