Hoy 
La Conferencia del Episcopado Dominicano, en una Carta Pastoral a propósitode celebrarse el quinto centenario de la fundación de la Arquidiócesis de Santo Domingo, resaltó ayer los esfuerzos de la Iglesia Católica por contribuir con la educación, la salud y el bienestar de los huérfanos y de los ancianos.
Los obispos refieren que desde el 19 existieron escuelitas dirigidas por profesores y buenas mujeres católicas que ofrecían los conocimientos rudimentarios a niños y niñas en un momento en que el país no estaba en condiciones de ofrecer una educación más formal.
Plantean que en el siglo XX, a partir de la década de los 30, las congregaciones religiosas masculinas y femeninas fundaron colegios privados, casi uno por provincia.
Poco después, cuando la opción preferencial por los pobres, las energías educativas de la Iglesia se pusieron a disposición de los sectores excluidos, convirtiendo sus colegios privados en Oficializados y asumiendo escuelas y politécnicos públicos en barrios y pueblos, agregan los obispos.
En salud. En su carta pastoral la iglesia destaca que la atención de la salud ha sido siempre preocupación de la Iglesia, desde los tiempos coloniales en el Hospital de San Nicolás, de San Andrés y de San Lázaro. Luego las obras de salud creadas por el Padre Billini.
El texto sigue con la explicación y cita que más adelante con la llegada de las Hermanas del Cardenal Sancha, Mercedarias e Hijas de la Caridad se fueron asumiendo hogares de huérfanas y de ancianos.
Afirma que la Iglesia también ha asumido una función civil profética y mediadora en una sociedad que no encuentra su institucionalidad y vive expuesta a la inestabilidad social, al tiempo que señala su afán por una mayor honestidad.
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Honestidad
Los obispos afirman que hoy día la iglesia se afana por mantener la honestidad de vida y una solida espiritualidad de sus miembros, clérigos y laicos.
Mediación
En su mensaje la Conferencia del Episcopado sostiene que desde el Sermón de Montesinos y de Fray Bartolomé de las Casas hasta la fecha la asunción de la responsabilidad y la de mediación social y política ha sido una labor difícil.
