Los obispos de las diócesis de Baní, San Juan y Barahona deploraron que las nueve provincias del sur ocupen aún los primeros lugares en el mapa de la pobreza del país.

Los prelados reclamaron a los sectores empresariales, líderes políticos, sociales y religiosos empujar iniciativas que cambien esa realidad.

Durante una conferencia de prensa, Víctor Masalles, Tomás Alejo Concepción y Andrés Napoleón Romero Cárdenas, consideraron urgente concretar un verdadero desarrollo económico y social, que genere riquezas, con empleos dignos y seguros.

Expresaron que esto sería posible con un cambio de mentalidad, en el que los empresarios locales sepan que lo son, que el dinero ganado en las actividades comerciales lo inviertan en sus comunidades, y que entiendan que no deben pedir todo a los presidentes.

Los representantes de la Iglesia católica pusieron como ejemplo el paradójico caso de la provincia San Juan, considerada como el “El granero del sur”, y en la que hay una considerable producción agrícola; sin embargo, es una de las más pobres y que la migración de sus habitantes cada día va en aumento.

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Explotación El Romero

Cuando les preguntaron por los planes de exploración de la mina de oro en la comunidad El Romero, en este municipio, los obispos favorecieron su explotación, previo a los estudios de factibilidad medioambiental, siempre y cuando los resultados determinen que no provocaría daños a los recursos naturales, en especial al agua.

“Todo lo que somos, lo que es el mundo hoy, teléfonos, vehículos, maquinarias, energía eléctrica, lo consumimos, lo disfrutamos, porque lo encontramos en la naturaleza”, indicaron.

Agregaron: “Las explotaciones mineras metálicas o no, generan inmensas riquezas, lo que hay es que garantizar que las poblaciones donde se exploten esos recursos, reciban buena parte de los beneficios”.

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Obras que reclaman

Los sacerdotes, que representan a las provincias Peravia, Azua, San Juan, Barahona, Baoruco, Pedernales e Independencia, expresaron que la región urge la construcción de hospitales de segundo y tercer nivel de atención, materno-infantiles, industrias procesadoras de carne y de granos.

Asimismo, la ejecución de obras que permitan el desarrollo de la actividad turística.

Satisfechos con presidente

Romero Cárdenas, Concepción y Masalles, líderes católicos del sur, manifestaron satisfacción porque el presidente Luis Abinader ha puesto los ojos y los oídos en esa región, y reiteraron que no es justo dejar todo a los gobiernos.

Insistieron con el papel de los empresariados y expresaron que el empresariado de esa zona tiene un reto: “tomarle la palabra al jefe del Estado, unirse a sus planes y proyectos, porque el desarrollo de nuestra región no tiene color de partidos políticos”.

Los religiosos llamaron a la población a manifestar el mismo interés por el desarrollo de su zona, para ver resultados.