La Asociación de Industrias de la República Dominicana consideró que la autonomía de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales es una condición indispensable aunque insuficiente para despolitizar el tema de la energía eléctrica en el país y dar pasos a la solución de un problema que se arrastra por décadas.

Manuel Diez Cabral, presidente de la AIRD, dijo que la estatización de empresas que fueron privatizadas fue una contrarreforma, consecuencia de una gestión eléctrica politizada en el país y una regulación ineficiente por parte del Estado.

“Entendemos que este decreto puede ayudar a despolitizar el sector eléctrico. Sin embargo, si se desea seguir profundizando la institucionalización de dicho sector, los miembros de los distintos consejos no debieran ser nombrados por conveniencias políticas. Mientras haya personas en los consejos que actúen en función de intereses partidarios, será difícil que la administración y los técnicos puedan avanzar hacia verdaderas soluciones”, enfatizó Diez Cabral.

Consideró que la iniciativa puede verse como un pequeño esfuerzo, que debe ser transitorio, para que la política no gobierne la toma de decisiones en el sector eléctrico, “pero también puede convertirse en un boomerang si se mantiene en vigencia por mucho tiempo y no se logra retomar la reforma del sector, pasando a manos del sector privado la distribución de energía.”, señaló. Afirmó que la función de coordinación no está prevista ni en la Ley de Reforma de la Empresa Pública, ni en la Ley General de Electricidad, ya que fueron dictadas en un marco en donde el Estado administraba sólo la transmisión y la generación, no la dDistribución.