NUEVA YORK, (AFP).- El primer ministro británico Gordon Brown defendió ayer martes en la ONU la «coalición por la justicia» que busca lograr los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio.

 Los objetivos, a los que se comprometió la comunidad internacional durante una cumbre de la ONU en Nueva York en 2000, apuntan, directa o indirectamente, a reducir la pobreza de aquí al 2015.

 Esta es la lista de dichos objetivos:

 1. Vencer la extrema pobreza y el hambre

 – Reducir a la mitad, de aquí al 2015, la proporción de personas viviendo con menos de un dólar por día, y pasando hambre.

 2. Universalizar la educación primaria

 – Otorgar los medios, a todos los niños y niñas del mundo, de terminar el ciclo completo de estudios primarios.

 3. Promover la igualdad entre los sexos y la autonomía de las mujeres

 – Acabar con las disparidades de sexo en las enseñanzas primaria y secundaria de aquí al 2005 dentro de la medida de lo posible, y en todos los niveles para el 2015 a más tardar.

 4. Reducir la mortalidad de los niños de menos de cinco años

 – Lograr una reducción de dos tercios de aquí al 2015 de la mortalidad de los menores de cinco años.

 5. Mejorar la salud materna

 – Lograr una disminución de tres cuartos, de aquí al 2015, de la tasa de mortalidad materna. Cerca de 500.000 mujeres mueren anualmente durante su embarazo o el parto.

 6. Combatir el sida, el paludismo, y otras enfermedades

 – Conseguir, de aquí al 2015, detener la propagación del sida, comenzar a invertir la tendencia actual, y dominar el paludismo y otras enfermedades graves.

 7. Asegurar un entorno durable

 – Reducir a la mitad, de aquí al 2015, el porcentaje de la población que no tiene acceso, de manera durable, al aprovisionamiento en agua potable salubre, y a servicios de saneamiento básicos.

 – Lograr mejorar considerablemente, antes de 2020, la vida de por lo menos 100 millones de habitantes de viviendas mediocres.

 8. Constituir una cooperación global para el desarrollo

 – Apuntar a la constitución de un sistema comercial y financiero multilateral abierto, reglamentado, previsible y no discriminatorio, en el marco de un compromiso por el desarrollo y la lucha contra la pobreza, a nivel nacional e internacional.

 – Tratar particularmente las necesidades de los países menos avanzados, integrando un programa para aliviar la deuda, admitir en franquicia y sin contingentes productos exportados por estos países, y otorgar una ayuda pública más generosa a los países que demuestren tener la voluntad de luchar contra la pobreza.

 – Responder a las necesidades particulares de los países sin litoral, y de los pequeños Estados insulares en desarrollo.