El temor a tener que enfrentar una nueva justicia tras dejar el poder, mantiene al presidente Danilo Medina Sánchez y a sus más cercanos colaboradores a tratar de mantenerse en el Gobierno más allá del año 2020.
Luego de destaparse los escándalos propiciados por la empresa brasileña Odebrecht en diciembre de 2016, no creemos que el presidente Medina y sus colaboradores, hayan podido tener sueños tranquilos.
Y más aún, con ese cantaleteo del movimiento Marcha Verde, reclamando fin de la corrupción y la impunidad y proclamando a Punta Catalina como cuerpo del delito y pidiendo ser sometido a la justicia; no es posible que el presidente Medina pueda tener feliz sueño.
Sostenemos que el presidente Medina y sus más cercanos colaboradores están obligados a buscar mantenerse en el Poder, ya que fuera de él, vendrán sobre ellos serias acusaciones de las que no podrán sustraerse.
Hace unos días más de 200 intelectuales, profesionales, políticos y dirigentes sociales hicieron una proclama en el parque La Lira del Distrito Nacional, en la que convocan a una constituyente, pidiendo la ruptura del orden constitucional, y acusando directamente al presidente Medina de una serie de actos supuestamente reñidos con la ley, que según ellos, ponen en cuestionamiento la probidad, pulcritud y legitimidad del mandatario.
Por todo ello, es que mantenemos nuestra posición de que el presidente Danilo Medina y sus más cercanos colaboradores están obligados “a carabina”, y luchar con uñas y dientes por mantenerse al frente de la conducción del Estado, ya que si pierden el Gobierno tendrán que enfrentar una nueva justicia con otros actores en las denominadas altas cortes. Eso es lo que reclaman los miembros del Movimiento Marcha Verde.