El ingeniero Romeo Llinás consideró que para solucionar el problema que han representado las inundaciones que afectan la región del Lago Enriquillo se requiere una serie de obras hidráulicas que tardarían entre 10 y 15 años levantarse.
Llinás indicó que se debe mejorar el manejo de las aguas fluviales de la cuenca Enriquillo, que se han estado desviando hacia el lago, lo que ha duplicado su tamaño en los últimos cinco años.
Dijo que la falta de control de las avenidas es lo que ha inundado el río Yaque del Sur, la laguna de Cabral y otros cuerpos de agua.
Dijo, además, que la desembocadura del río está sedimentada, lo que hace que haya un represamiento de las aguas. Detalló que estas aguas se han descargado hacia el lago y de ahí su incremento.
Recordó, además, que los eventos extremos de lluvias registrados en los últimos años han permitido que las rocas calizas almacenen gran cantidad de agua que luego se fueron descargando al lago.
Llinás dijo que hay que aprender a manejar esas aguas para aprovecharlas y que no causen desastres ecológicos como el que afecta a la zona del lago Enriquillo, sino que sea una región con alta producción agrícola.
Confió en que las autoridades actuales afrontarán ese problema de canalización de las aguas alrededor del lago Enriquillo.
Histórico. Llinás apuntó que los niveles del lago han llegado más allá de donde se encuentra ahora y que muchos de sus terrenos han sido ocupados.