El ministerio de Obras Públicas construye en tiempo record  puente El Cajuilito en la carretera Sánchez, estructura que fue demolida, luego que desaprensivos le robaron los rolos metálicos, causando daños sensibles que la resquebrajaron.

Los trabajos fueron realizados por el  Consorcio  Vías Dominicanas (Dovicom), como parte del proyecto Viadom, que ejecuta MOPC en las principales carreteras del país.

El nuevo puente tiene una longitud de 11.65 metros, con un paseo de 2 carriles de 3.65 metros y paseos exclusivos para peatones de 0.8 metros protegidos por barreras New Jersey.

El ingeniero Víctor Díaz Rúa explicó que el sistema de apoyo del antiguo puente El Cajuilito era de tipo móvil, compuesto por rolos y placas metálicas. Estas piezas fueron sustraídas por desaprensivos lo que provoco el cierre y posterior demolición de la estructura, lo que dio paso a un  puente con nuevo diseño de placas de neopreno de una pulgada  de espesor.  

Originalmente el tablero del puente Cajuilito estaba formado por 5 vigas continuas de hormigón armado, vaciadas en sitio con alturas variables en los apoyos con un ancho promedio de 0.50 metros lineales.

La nueva estructura  está formada por 6 vigas doble prefabricadas de hormigón pretensado de 350 kilogramos por centímetros cuadrado. Tiene una altura de 0.86 metros lineales, mientras que  la losa tiene un espesor de 0.15 metros, doblemente armada con varilla de media en ambas direcciones  con concreto de 240 kilogramos por centímetros cuadrados.

La construcción del nuevo puente conllevó además  la colocación de las barandas laterales y  una pasarela peatonal.

Al puente El Cajuilito le fue colocados 2 la colocación de material de asfalto de 2 pulgadas y media de espesor aplicado en caliente y posterior a este proceso, el puente será señalizado vertical y horizontalmente.

Los muros de los estribos se encontraban deteriorados y fueron recuperados con encaches de piedras y desagües para la fluidez de las aguas naturales para evitar la erosión.

LOS DAÑOS

El 7  de septiembre dos ladrones robaron cuatro rolos de  una línea donde iban cinco, dejando la estructura prácticamente sin soporte.

Los rolos metálicos servían  de apoyo al puente, y cuando falla cualquiera de esas piezas se  producen   movimientos en la parte central de la estructura.