Un diagnóstico sobre la realidad social y económica de la juventud     señala  la educación como la herramienta fundamental para desarrollar una estrategia institucional dirigida a reducir las desigualdades sociales  y recomienda  reorientar las políticas públicas de ese sector poblacional

La juventud de República Dominicana, registró el mayor incremento en el desempleo urbano juvenil en el año 2011 en comparación con el 2010, de todos los países evaluados del área del Caribe, con un  aumento de un 4%, según se hace constar en el primer diagnóstico del Observatorio Juvenil de  Políticas Públicas.

  El desempleo general en el sector juventud, comprendido en  edades entre 15 a 24 años, es de 29.70%, donde las mujeres desempleadas duplican a los hombres. En los últimos años, el Producto Interno Bruto (PIB) se multiplicó por 2.55, mientras que el empleo generado aumentó  1.58 veces. “Esto quiere decir que en nuestro país el número de empleos no crece acorde con el  incremento del PIB, sino que sólo aproximadamente a la mitad”, precisó  Eilyn Beltrán, coordinador de los trabajos relativos al diagnóstico.

Al participar en la Esquina Joven los principales directivos de la organización, de reciente creación, esbozaron una serie de recomendaciones para enfrentar  este problema, así como la inseguridad ciudadana y  la debilidad  del sistema educativo.  

Estuvieron en el conversatorio  además de Beltrán, Alexandra Cáceres Reyes, directora ejecutiva; Fanny Bautista, coordinadora de Eventos y Organización; Yeiro Mateo Calderón, director de  Proyectos y Luis  Hernández, coordinador de Prensa. 

Para mejorar el nivel de empleo, estos jóvenes profesionales proponen  la creación de una ley para el incentivo del empleo juvenil con todas las condiciones laborales establecidas  en los códigos y en los acuerdos internacionales con la  Organización Internacional del Trabajo (OIT).  

Asimismo proponen que de las asignaciones que van al Programa de Apoyo a la Micro, Pequeña y Mediana Empresas (Promipyme), se cree un fondo para fomentar proyectos de micro y pequeñas empresas para los  jóvenes y estimular verdaderas áreas de competitividad que integren las industrias de futuro y los laboratorios de investigación.

Desarrollo Humano.   Otra propuesta es propiciar una iniciativa a través del Gobierno central que declare el 2013 como el año de “Desarrollo humano, económico y educativo de la juventud dominicana”.

También dar inicio al proyecto juvenil “Mi Primer Negocio”, para la generación de riquezas. Según explicaron, el  sector informal emplea el 56% de los trabajadores.  Precisaron que sólo el  30% de la población se beneficia efectivamente de un empleo asalariado o independiente y declarado y participa en el financiamiento de la protección social. Puntualizaron los  panelistas que desde hace 20 años, los salarios reales no han aumentado y que el diálogo sindical puede difícilmente cambiar la situación.

Con una población asalariada sindicalizada de  6 a 7%, los sindicatos sólo representan 2,1% de la totalidad de la población activa. “La educación dominicana, más que estar pasando por una profunda crisis, se ubica en el centro del problema de todos los males de nuestra sociedad”, enfatizó Cáceres Reyes.

   Insistió en señalar que una sociedad que no se empodera de sus espacios, es porque es desconocedora de sus leyes.

 “Tal vez este desconocimiento de las leyes de los miembros de la sociedad, no es una casualidad, sino una causalidad provocada por el mismo sistema político que se resiste a que los ciudadanos conozcan y se eduquen para que sean conocedores de sus derechos y deberes. La sociedad dominicana está obligada a demostrarlo, de lo contrario la historia juzgará sus acciones”, puntualizó la joven profesional.

Educación técnica y superior.    Al referirse a este aspecto, entiende que la educación superior y técnico-profesional son neurálgicas en el desarrollo del aparato productivo de una sociedad. En esa dirección sostienen que debe existir una conexión directa entre el empresariado y estos sectores educativos, equilibrados por las políticas públicas que el Estado debe diseñar para preparar el material humano en las áreas que se necesiten, en base a una planificación a mediano y largo plazo. Yeiro Mateo explicó que República Dominicana cuenta con un marco legal, la Ley de Educación Superior, Ciencia y Tecnología 139-01, de la cual, señala, se puede partir para desarrollar las políticas públicas necesarias que vayan acorde con las nuevas tendencias de desarrollo de la nación.

El país presenta grandes deficiencias en lo que debe ser una correcta planificación, organización, administración y control en la preparación técnica y docente del material humano, que vaya coordinado con la tendencia de desarrollo del país, agregó.

  Modelos.  Manifestó que carreras como educación, contabilidad, derecho, administración e informática son las que mayor cantidad de alumnos tienen matriculados, pero no necesariamente son las carreras que más se necesitan para el desarrollo vertical de la sociedad.

“El sistema de educación superior presenta grandes problemas, que vienen arrastrados desde los niveles de básica e intermedia. Estas fuertes deficiencias son llevadas al nivel superior no sólo por los estudiantes, también por el cuerpo docente, que muchas veces presenta grandes debilidades en el proceso de enseñanza”, intervino Beltrán. Entiende que los modelos de educación técnico profesional, como el INFOTEP y el ITLA, son una necesidad que debe ser replicada en todas las regiones del país de manera que se inicie una reforma general en la preparación de técnicos-profesionales en las diversas áreas del aparato productivo nacional.

A tales fines plantean que estos modelos sean incluidos en la Estrategia Nacional de Desarrollo (END), aprobada ya por el Congreso Nacional.

Recomiendan  que se preparen los recursos humanos en función de las necesidades de las diversas áreas de desarrollo de la nación y la aprobación de un proyecto de Ley que de prioridad al otorgamiento de becas a nivel nacional e internacional en base a las necesidades del país.

 Fomentar la investigación científica es otro planteamiento.

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Perfil

El Observatorio Juvenil es una organización  consagrada con la difusión propositiva de las buenas prácticas en la implementación de políticas públicas a favor de la juventud y todo su entorno, explicó Alexandra Cáceres Reyes.

 Coordina el seguimiento a las políticas públicas  planificadas y ejecutadas, a las instituciones seleccionadas, y en adición  hará propuestas de  reingeniería, reglamentos, leyes y regulaciones con el objetivo de buscar las posibles soluciones a los problemas nacionales. En lo adelante, el observatorio desarrollará   conferencias, simposios y mesas redondas, entre otras actividades.

Preguntas

Efren Cuello

¿Qué respuesta esperan tener    de la sociedad  y sus diferentes estamentos con la presentación de los resultados de este diagnóstico?”.

Dania Taveras

¿Tienen previsto crear capítulos de esta organización en pueblos apartados del casco urbano, de manera que los jóvenes  de allí puedan integrarse?         ”

Wender Mata

¿Cómo podemos los jóvenes interesados involucrarnos en   las actividades que organiza el Observatorio?”.

Directivos

Alexandra Cáceres Reyes

Directora Ejecutiva Observatorio

El Observatorio Juvenil persigue ser garante  de  las políticas públicas de juventud, en pro de optimizar el bienestar social de este sector poblacional”.

Eilyn Beltrán

 Coordinador de Diagnóstico

Con  este  informe sobre la realidad social de la juventud, queremos llamar la atención de los sectores vinculados, haciendo propuestas  viables para lograr soluciones reales”.