El restablecimiento del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) tendrá que vencer dos obstáculos importantes: uno es que todavía no cuadran los números para cumplir con las exigencias de ese organismo, y el otro es si finalmente la reforma que apruebe el Congreso Nacional tendrá el mismo impacto fiscal de la que prepare el equipo del presidente electo, doctor Leonel Fernández, para ser sometida al poder legislativo por el presidente Hipólito Mejía.
También tendría que superar un tercer obstáculo, y es conseguir la fuente de financiamiento para cerrar una brecha de 100 millones de dólares de vencimientos de la deuda externa para este año, sin lo cual el acuerdo con el Club de París quedaría en el limbo.
En cuanto a la reforma fiscal, se ha informado que a sólo diez días que faltan para que el equipo del nuevo gobierno tenga listo su proyecto de reforma impositiva, para que el presidente Hipólito Mejía la someta en quince días al Congreso Nacional, todavía los números no cuadran en base a las opciones que en términos impositivos y de reducción del gasto público han sido barajadas.
Se explicó que cuadrar esos números no está resultando una tarea fácil porque el nuevo equipo de gobierno teme ir más allá en materia impositiva de lo que la economía puede soportar en estos momentos de recesión económica y porque en materia de gasto público los recortes parecen que se limitarían a la focalización del subsidio al gas licuado de petróleo y la reducción hasta su eliminación del subsidio a la electricidad, objetivo cuya cumplimiento estaría por verse.
Pero aún cuando el gobierno logre armar un paquete fiscal que sea aceptado por el FMI, habría que esperar a ver si el Congreso no le introduce modificaciones, y si en caso de modificarlo, hace los ajustes correspondientes para que mantenga su impacto neto sobre las finanzas públicas, se explicó.
Este es el punto que más inquieta, sobre el destino final de la reforma fiscal, a la comunidad financiera internacional, y particularmente al FMI.
Según revelaciones hechas a la sección económica de Hoy, cuando una misión visitó recientemente a los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados, éstos le expresaron su deseo de colaborar con la reforma, pero le advirtieron que ellos cumplirían con su rol de legislador, con independencia tanto frente al presidente electo Leonel Fernández como ante el presidente Hipólito Mejía.
Ante esa situación, la pregunta que se hacen los mercados es si el Congreso acogerá, sin modificación la reforma que se le presente, y si le introduce modificaciones, si hará los ajustes de lugar y en el tiempo que requieren las circunstancias, para que asegurar el mantenimiento del acuerdo con el FMI.
Con relación a la renegociación de la deuda, el Club de París había exigido inicialmente que el gobierno reestructura 100 millones de dólares con los acreedores privados, en aplicación de la cláusula de comparabilidad en el tratamiento de la deuda.
Se indicó que el gobierno se ha ido por la opción de gestionar un préstamo para cubrir esa brecha, y la respuesta del Club de París ha sido de que pudiera aceptar esta salida, pero siempre y cuando la concertación del nuevo financiamiento no sea avalada con ingresos fiscales.
Se explicó que con esta condición, establecida por el Club de París, se busca evitar que quienes otorguen este financiamiento no queden colocada en una posición privilegiada frente a los demás acreedores del país.
[b]Sobre el ITBIS y el selectivo[/b]
El coordinador de la comisión de Transición del Partido de la Liberación Dominicana, licenciado Danilo Medina, afirmó que está opuesto a que sea ampliada la base del Impuesto a las Transferencias Industrializados (ITBIS) y que sea aumentado el impuesto selectivo al consumo a bienes como los vehículos de motor.
En cuanto a los autos, Medina dijo que con los actuales niveles impositivos, «las ventas se han desplomado, y si se le aplican más impuestos a los vehículos, desaparecería el sector, y eso no es lo que se quiere».
Medina consideró que la sociedad está consciente de que hay que tomar medidas, pero también espera que las mismas tengan un límite.
Adelantó que se deberán tomar medidas para corregir las distorsiones en el otorgamiento de los subsidios, y se refirió particularmente al subsidio al gas licuado de petróleo y a la electricidad.
Expresó su optimismo en que el presidente Fernández sabrá como devolverla confianza a los sectores económicos, vía el control de la inflación y el fortalecimiento del peso, pero expresó que «la gente no se imagina en las condiciones en que está la economía dominicana».