POR ALTAGRACIA ORTIZ GOMEZ
La dirección del Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS) logró ayer a crédito la entrega de 100 filtros para los pacientes de diálisis, informó ayer la doctora Nelly Pérez, quien además indicó que el gasto en esos pacientes es superior a los 2.5 millones al mes.

La situación busca mitigar la carencia a que está sometida la Unidad de Diálisis del hospital Salvador B.Gautier, en donde ayer los pacintes se llenaron de miedo por la muerte en su presencia de la octava víctima, quien falleció por no recibir a tiempo el tratamiento de diálisis.

Se trató de José María Rodríguez, quien murió justo al momento de dializarse. La situación era crítica ayer y los pacientes reiteraron su petición al Presidente Leonel Fernández para que no los deje morir.

De su lado, la doctora Pérez, directora de IDSS indicó que hace esfuerzos por resolver la situación, aunque expresó que la institución gasta 2.5 millones de pesos.

Tanto la doctora Pérez como el director médico, doctor Rodolfo Núñez Musa confirmaron que hubo una reunión con la directiva de la Fundación de Pacientes Renales y Trasplantados, cuyos miembros entregarán una propuesta para resolver el problema en forma definitiva.

La situación era crítica en el hospital Gautier. En la sala de emergencia y la de diálisis cundía la desesperación de los enfermos.

Los pacientes expresaron su desesperación por la situación, tras indicar que se pasaron la vida cotizando para el IDSS, pero que ahora tienen que mendigar su derechos.

OTRO MUERTO

Rodríguez, de 29 años de edad murió en la sala de diálisis. Decía con freciencia que quería ver graduada a su hija de cinco años de edad.

Otra paciente que murió por falta de diálisis es Cándida de la Cruz; también murió Felipe Vásque y Santiago Reyes.

Otros pacientes renales que murieron por la falta de diálisis fueron Braulio García y Eloisa Reyes. En total suman ocho los pacientes que mueren por falta de diálisis.

La escenas dolorosas se repetían ayer en el hospital Gautier. El pasillo que da a la unidad de diálisis estaba lleno de pacientes, pero algunos aseguraban que una parte importante de los enfermos ha dejado de ir al hospital, porque saben que no hay materiales para su tratamiento.

«Aquí no hay gasa, esparadrapo, filtro, ni medicina», expresó a HOY Juan de los Santos, quien en ese momento estaba conectado a una máquina de diálisis.

Médicos y enfermeras de esa unidad expresaron que sienten impotencia ante la muerte y la descompensación que sufren sus pacientes.

Analizaron que contrario a otro tipo de enfermos, los que tienen deficiencias renales ven a sus médicos y enfermeras hasta tres veces por semana.

«Entre nosotros y los pacientes se establece una relación de familiaridad, porque a muchos de ellos los tenemos aquí hasta por ocho años», sostuvo una enfermera.

También los médicos de la Unidad aseguraron que la situación es desperante, pues allí no hay medicamentos y el miedo desespera a los pacientes, quienes temen morir.

Cada diálisis cuesta hasta RD$2,600, pero la mayoría de ellos tiene dificultad para conseguir ese dinero.