Occidente no detiene los sobornos en el exterior

Occidente no detiene los sobornos en el exterior

POR HUGH WILLIAMSON
En Berlín

Muchas compañías occidentales han limpiado su comportamiento con la corrupción en casa, pero todavía tienen que parar el pago de sobornos en los países pobres, revelará el estudio más importante sobre pagos corporativos ilícitos que se publicará la semana próxima.

Mientras que la “clara doble moral” daña la reputación de los negocios internacionales, el estudio revela igualmente que compañías de Rusia, China, India y Brasil son más propensas a pagar sobornos, tanto en su país de origen como en el extranjero, para conseguir los contratos.

Estas economías de mercados emergentes están cerca del fondo del “Bribe Payers Index” -el indicador de los que pagan sobornos- de los 30 principales países exportadores, basado en respuestas de 11,000 ejecutivos de empresas en 126 países, de a cuerdo con David Nussbaum, director ejecutivo de Transparencia Internacional, el guardián qnti-corrupción.

Es probable que las revelaciones arrojen luz crítica sobre la reciente oleada de inversiones extranjeras de las compañías de energía rusas y las chinas respaldadas por el Estado, en África.

“Muchos países como China y malasia defienden sus compañías con el argumento de que no hacen más que seguir la práctica local de pagar sobornos, y que de no hacerlo así interferirían con la soberanía nacional”. Nussbaum dijo en una entrevista en las oficinas centrales de TI en Berlín: “Pero pagar sobornos también es interferir”, e instó a los gobiernos de las economías emergentes a que pongan en vigor leyes contra el soborno.

El sondeo de TI sigue un ejercicio similar, más reducido de las organizaciones no-gubernamentales en 2002. Una serie de escándalos de corrupción internacionales desde entonces incluyen casos legales por sobornos en Halliburton, el grupo de defensa e infraestructura de Estados Unidos en Nigeria, y el escándalo de las Naciones Unidas del programa “petróleo por alimentos” para Irak, que implicó sobornos por valor de US$1,8 millardos, por parte de 2,400 compañías en todo el mundo.

Nussbaum recalcó que el pago de sobornos por compañías del mundo industrializado varía ampliamente entre países y sectores. En el sondeo de 2002, compañías de Australia, Suecia y Suiza tuvieron “la propensión más baja a pagar sobornos”. “El [nuevo] sondeo revela que no todas las compañías de todos los países pagan sobornos -por eso el argumento de que las empresas tienen que pagarlos porque otros lo hacen es falso”, concluyó.

Normas más elevadas no solo son los únicos pasos necesarios para combatir la corrupción. Los estados miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) desde finales de los años 90 adoptaron leyes que prohiben que als compañías paguen sobornos en el extranjero.

Dice el señor Nussbaum que aunque puede que estas leyes hayan vuelto más cautelosas a las compañías sobre el pago de incentivos ilegales en otros países desarrollados, la falta de hacer cumplir la ley por parte de los países implica que tienen poco impacto más allá de su territorio.

“Es una hipocresía de los gobiernos de países industrializados aprobar leyes que prohiban el soborno en el exterior por parte de compañías con oficinas centrales en sus países, y que hagan muy poco o nada para hacer valer las leyes”, añadió.

Se ha ejecutado solo un puñado de procesos a ejecutivos de empresas como resultado de las leyes anti-corrupción en la OCDE.

Los gobiernos de Occidente necesitan de mucho más elaboración conjunta para vincular las políticas de ayuda con las estrategias anti-corrupción”, dijo Nussbaum.

VERSION IVAN PEREZ CARRION

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