AZUA. Todo comenzó con la rotura de un tornillo de la goma  de la patana cargada de cemento, lo que obligó al conductor a detenerse   en medio del carril Este-Oeste, en el  kilómetro  7 de  la carretera Baní-Azua.  Media hora  después, a las 12:45 de la madrugada, un autobús procedente de la capital se estrelló contra esta, dejando un saldo de ocho personas muertas y 13 heridos.

El chofer de la patana, identificado como “El Titi”, huyó pero  fue apresado su ayudante, el mecánico David Díaz. Los muertos fueron identificados como José Luis Félix Jiménez, de 26 años, quien era el cobrador del minibús, y los haitianos Dachely Pridoliens, Víctor Desi, Celix Fery, Jonas, Wanda Pomasy, Hametil Joshep,  y uno no fue identificado.

Entre los heridos se encuentran el chofer del autobús, José Elías Ortiz, de 36 años, y los haitianos Jessi Alexander, Jorge Luis,  Manuca Yine, Leivis Moesis, Veronica Plumafel, Andri Yosepht, Yunior Letila, Vicelint Alexi, Wilson Félix, Amecy Yuseph, quienes recibieron atenciones médicas en el hospital  Taiwán.