Ocurren desórdenes en la UASD

Ocurren desórdenes en la UASD

POR M. ARISTY CAPITAN
Aunque parecía ser algo superado en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD),  ayer se convirtió en el escenario de un enfrentamiento entre un grupo de dirigentes estudiantiles y agentes de la Policía. Desde el interior de la academia se escucharon detonaciones de armas de fuego. Los policías sólo les lanzaron bombas lacrimógenas con la intención de dispersarlos.

Los estudiantes mostraron de esta manera su disgusto por el asesinato del vocero del Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO) en Navarrete, Elvin Amable Rodríguez (Onny), de 22 años, quien también pertenecía al Frente Estudiantil de Liberación Amín Abel (FELABEL) de la UASD.

«Estamos peleando porque uno de los dirigentes estudiantiles del FELABEL fue dado de baja. Entonces estamos reclamando esa muerte del compañero Onny», explicó Zacarías Alberto Sierra.

Pero los reclamos, indicó Sierra, también incluyen a los nueve compañeros del FELABEL que han sido heridos durante los enfrentamientos que han tenido con los agentes del orden.

«Tuvimos problemas con la Policía Municipal porque le rompimos los vidrios (que están en los letreros de las paradas de la OMSA. Ellos les dieron golpes a los estudiantes por la cabeza con la pistola y los partieron. Por eso también estamos haciendo la huelga», manifestó Sierra.

Uno de los momentos más difíciles que se vivió durante la mañana de ayer tuvo lugar en las inmediaciones de la puerta peatonal que da acceso a la UASD desde el Alma Mater, donde incendiaron uno de los quioscos colocados por el Ayuntamiento del Distrito Nacional en la isleta que antecede al Paseo del Estudiante.

Fue allí donde los agentes de la Policía Municipal hirieron a algunos de los estudiantes, quienes no se conformaron quemar el quiosco, sino que desparramaron toda la basura en medio de la vía y apedrearon las paradas de la OMSA.

Minutos después del estallido de violencia, que provocó la salida masiva de los estudiantes que estaban dentro de la UASD, la entrada norte de la UASD se quedó tranquila: sin nadie en los alrededores, parecía una zona fantasma.

El ruido de los tiros, las pedradas y las bombas lacrimógenas, sin embargo, alertaban al caminante: quien entrara en la UASD y osara llegar hasta la Correa y Cidrón con Alma Mater podría tener un gran disgusto.

Todas las rutas de acceso a la universidad fueron cerradas, provocando que los conductores de vehículos privados y del transporte público tuvieran que evitar todas las calles que están en el perímetro de la UASD.

Mientras los enfrentamientos estaban en su punto más alto, dentro de la academia se escuchaban rumores de que no eran estudiantes de la UASD los que estaban detonando las armas sino que se trataba de tígueres que fueron infiltrados para ese propósito.

El rector de la UASD, Roberto Reyna, condenó ayer en la tarde el que los terrenos de la academia hayan sido tomados por los encapuchados para escenificar enfrentamientos con agentes policiales y llevar la intranquilidad al seno de la universidad.

Sin disponer el cierre de la docencia,  llamó a los estudiantes y a sus padres a confiar en las autoridades universitarias, al tiempo que dijo que no permitirán acciones que riñan con la normalidad de la Primada de América.

En ese orden, el rector exhortó a los profesores, estudiantes y empleados a seguir en sus labores habituales porque no dejará que un grupito de «desaprensivos» cree el caos y la intranquilidad en la academia.

«Mantendremos la paz, el sosiego y la tranquilidad. La gente tiene derecho a protestar de manera pacifica pero sin tomar el campus de la academia como escenario de desórdenes».

Publicaciones Relacionadas

Más leídas