POR DIONISIO SOLDEVILA
SAN JUAN, Puerto Rico. – El pitcheo dominicano dio mucho de qué hablar al momento de conformar el equipo para el Clásico Mundial de Béisbol. La ausencia de Pedro Martínez representó el principal problema y las posteriores deserciones de Francisco Cordero, Armando Benítez y José Mesa causaron un hueco en el bullpen. Pero ayer, contra Cuba, el zurdo Odalis Pérez demostró que es una figura en la que realmente se puede confiar en momentos de presión.

Pérez trabajó cuatro entradas y dos tercios de pura excelencia, permitiendo solo tres indiscutibles y sin anotaciones ante un equipo de Cuba que solo un día antes había castigado a Venezuela.

“El equipo cubano es grandioso, pero me mantuve mezclando mis lanzamientos y tuvimos buenos resultados”, dijo Pérez luego del encuentro de ayer en el que se adjudicó su segundo triunfo del Clásico Mundial de Béisbol.

Pérez respondió a la confianza del dirigente Manny Acta, a quien muchos críticos habían pedido no usar a Pérez como la primera opción para subir al montículo contra los cubanos luego de que permitiera tres carreras contra Italia en la primera ronda en Orlando.

“Odalis hizo un trabajo fantástico”, dijo Acta. Pero ese trabajo fantástico estaba siendo monitoreado bien de cerca por los Dodgers de Los Angeles.

Tomando en consideración que solo tenía tres días de descanso, Pérez estuvo lanzando con un estricto límite de pitcheo.

“Hablamos con el coach de pitcheo de los Dodgers Rick Honeycutt, porque Odalis solo tenia tres días de descanso y él no iba a pasar de 50 lanzamientos en ese juego”, dijo Acta.

De hecho, no lo hizo, pues Pérez lanzó sus cuatro entradas y dos tercios en apenas 48 lanzamientos.

Y ese trabajo fantástico del que Acta hizo referencia tuvo mucho que ver con la conciencia de Pérez de que ese partido de ayer tarde era uno que no podía darse el lujo de perder.

“Yo entendía que si hubiéramos perdido hoy (ayer) nos hubiéramos ido a casa mañana (hoy). Por eso es importante que consiguiéramos la victoria. Eso es lo principal. Nos mantuvo con vida y entiendo – que si podemos salir y anotar al menos ocho o nueve carreras, podremos ir a la final.

“Pero al mismo tiempo, fue importante que ganáramos. Queremos seguir concentrados para el partido de mañana (hoy). Eso es lo más importante”.

La República Dominicana se enfrenta esta noche a Venezuela por segunda vez en el Clásico Mundial de Béisbol.

En su primer compromiso durante la primera ronda, celebrado en Orlando, en el Disney’s Wide World of Sports, la ofensiva dominicana dispuso sin inconvenientes de Venezuela.

Sin embargo, los bates criollos no han mostrado toda su fiereza en la segunda vuelta, siendo controlados por Puerto Rico en el primer encuentro en el que se perdió el partido 7-1 y en el segundo se aprovecharon varios errores cubanos, pero se dejaron escapar momentos determinantes para poner el juego de un solo lado.