Si modernizar significa reemplazar lo vetusto u obsoleto por lo que está de acuerdo con los avances recientes, entonces la Constructora Norberto Odebrecht ha modernizado una gran parte de la República Dominicana.

Esto es perceptible al desplazarse por el Corredor Duarte, un impresionante conjunto de nueve soluciones viales, integrado por el Túnel de la UASD, elevados y pasos a desnivel en las avenidas 27 de Febrero y la John F. Kennedy.

Es inevitable sentir el aire de modernidad al transitar ágilmente entre las autopistas Las Américas y Duarte. O al disfrutar el hermoso paisaje, combinada con el conjunto arquitectónico de las carreteras Casabito, El Río –en Jarabacoa- y la Autovía del Coral, 150 kilómetros de modernas y seguras vías rehabilitadas y construidas para favorecer el desarrollo agrícola, turístico, industrial, comercial y cultural de las regiones circundantes. 

Tres acueductos –el de la Línea Noroeste, provincia Valverde;   Samaná y Hermanas Mirabal- proporcionan agua tratada para consumo humano a más de 1,260,000 dominicanos.Las hidroeléctricas Pinalito y Palomino, edificadas en La Vega, Monseñor Nouel y San Juan de la Maguana, generan anualmente 350 gigawatts hora, más la rehabilitación de la hidroeléctrica de Jigüey, San Cristóbal, proporcionan energía limpia con recursos renovables y redujeron en 780,000 barriles diarios la importación petrolera nacional.

Odebrecht, organización brasileña de actuación global, fue fundada en 1944 por Don Norberto Odebrecht e integrada a negocios diversificados, con actuación y patrones de calidad mundiales. Recibió ingresos brutos durante el año 2012 estimados en US40,000 millones.

Tras ser seleccionada hace 10 años para la ejecución de las obras de infraestructura del país, Odebrecht obtuvo condiciones favorables para la economía dominicana, al contratar créditos por US2,000 millones con plazos por encima de 12 años y tasas blandas. La concesionaria Odebrecht es propulsora de la modernidad dominicana.