CARACAS (EFE).- La Organización de Estados Americanos (OEA) comienza el domingo en la capital venezolana un debate para ampliar el concepto político de la democracia incorporándole aspectos sociales como el derecho a la educación y la salud.

En el debate, que se desarrollará entre el 28 y el 29 de agosto, participarán ministros y representantes de los 34 países miembros de la OEA, con asistencia del secretario general de ese organismo, el chileno José Miguel Insulza.

Las propuestas que surjan para que la OEA incorpore a su normativa una serie de «derechos sociales irrenunciables» serán entregadas a una comisión que se encargará del estudio y redacción definitiva del documento a partir del 1 de septiembre en la sede de Washington.

«Se trata de incorporar los derechos sociales a la OEA, porque los derechos políticos, que ya están consagrados en la Carta Democrática Interamericana, no son suficientes para garantizar la democracia», planteó el ministro venezolano de Educación, Aristóbulo Istúriz.

«Limitarse a votar cada cierto tiempo no basta. Hay que desarrollar planes continentales de alfabetización, universalizar la educación preescolar, elevar el nivel de lectura del continente y rescatar la educación técnica, entre otras cosas», añadió.

La reunión, denominada «Diálogo Ministerial sobre la Carta Social de las Américas», fue convocada por el Gobierno de Venezuela que había propuesto sin éxito esta ampliación conceptual de la democracia desde 2001.

Jorge Valero, delegado de Venezuela en la OEA, explicó que si ahora ha sido posible discutir esta propuesta es porque en los últimos años han sido elegidos gobiernos progresistas en un importante número de países latinoamericanos.

La Carta Social, según los promotores venezolanos, «debe estar acompañada de un plan de acción social continental, que comprometa a los países y ayude a las naciones más débiles, de manera que se eleven los indicadores sociales del continente». Valero señaló que si las deliberaciones para aprobar la Carta Social concluyen antes de junio de 2006 podría celebrarse una asamblea extraordinaria de la OEA en Venezuela para su incorporación oficial a la normativa del organismo.

El proyecto de Carta Social recoge el derecho a una vida digna, a la educación, al trabajo, a la protección social, a la vivienda, al hábitat y los servicios básicos, a la identidad cultural, a la información, al deporte y al tiempo libre y el esparcimiento.

«Se trata de minimizar el déficit de justicia social que tiene la democracia sobre todo en América Latina», dijo Valero.

El Informe 2005 de las Naciones Unidas, dado a conocer recientemente, señala que en los últimos años se «agravaron la desigualdad y la pobreza en América Latina y el Caribe».

El documento denuncia que con los modelos de desarrollo aplicados «los pobres no se están beneficiando y amplios segmentos de la población de menos ingresos continúan excluidos de muchas áreas del bienestar público».

Advierte también de que, «sin importar cuánta expansión económica experimente un país, es más probable que la pobreza se reduzca en aquellos cuyos gobiernos implementen políticas que promuevan la igualdad e incluyan iniciativas para mejorar el acceso a los recursos, los ingresos, la educación y el empleo»

Al acto de inauguración del foro asistirá el presidente venezolano, Hugo Chávez, quien ha responsabilizado de las desigualdades sociales existentes en el continente al modelo de economía neoliberal que promueve Estados Unidos.

Chávez respalda la tesis de que mientras los modelos económicos privilegien el beneficio del capital sobre cualquier otra variable humana o ambiental, no sólo no se alcanzará la justicia social sino que estará en riesgo la continuidad de la vida en el planeta. EFE