PANAMA (AP).– Con la abstención de Venezuela, la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó ayer una declaración que condena enérgicamente el terrorismo y reconoce que es una amenaza a la infraestructura en el hemisferio.

La declaración de Panamá fue aprobada al concluir una reunión de tres días del séptimo periodo de sesiones del Comité Interamericano de la OEA contra el Terrorismo cuyo tema versó sobre «La Protección de la Infraestructura Crítica en el Hemisferio Frente al Terrorismo»».

El documento expresó la «más enérgica condena al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones por considerarlo criminal e injustificable, bajo cualquier circunstancia, en donde quiera y por quien quiera que sea cometido, y porque constituye una grave amenaza para la paz y la seguridad internacional, a la democracia, estabilidad y prosperidad»».

Venezuela quien participó de las deliberaciones no aprobó la resolución. En una nota a pie de página en el documento, el país sudamericano explica que «por razones de principio se reserva la aprobación de la declaración de Panamá… por considerar que la misma adolece de elementos que permitan un tratamiento integral del tema del terrorismo»».

Un comunicado de prensa de la embajada de Venezuela dijo que su delegación ratificó «el firme compromiso del país para enfrentar y combatir el terrorismo por considerar que el mismo atenta contra la dignidad humana y representa una amenaza a la paz y seguridad internacional»».

Explicó que no acompañó la declaración de Panamá al «considerar que la verdadera lucha contra el terrorismo pasa por el fortalecimiento de la cooperación en el ámbito de la asistencia jurídica mutua para extraditar o juzgar a terroristas»».

Algo que no ocurre, dijo, con la solicitud de extradición de Luis Posada Carriles a quien Venezuela considera terrorista por haber sido encontrado culpable de la explosión de una aeronave de Cubana de Aviación en 1976.

Ese pedido «ha sido desatendido por el Gobierno de los Estados Unidos. En este sentido, no puede ser sincera la lucha contra el terrorismo si se da cobijo y protección al más conspicuo terrorista del hemisferio»», recalcó. La declaración reconoce que el terrorismo es una amenaza a la infraestructura crítica y destaca la importancia de que los países identifiquen esas infraestructuras.

En el documento la OEA definió infraestructura crítica a todas aquellas instalaciones, sistemas y redes, así como servicios y equipos físicos y de tecnología de la información cuya inhabilitación o destrucción tendría un impacto negativo sobre la población, la salud pública, la seguridad económica, el medio ambiente, la gobernabilidad democrática o el eficaz funcionamiento de un Estado.

El Canal de Panamá, que es un punto clave del comercio internacional, fue considerado como un ejemplo de infraestructura crítica para el Hemisferio. El documento hizo énfasis en la necesidad del intercambio de información y experiencias, y armonizar los esfuerzos regionales.