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Un oficial de la Policía Nacional adscrito a la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y un agente heridos ayer en San Francisco de Macorís y en el barrio de Capotillo, en la capital, se recuperan satisfactoriamente en los centros médicos donde fueron ingresados tras ser atacados a balazos.
El capitán José Altagracia Bautista Rosario, jefe de operaciones de la DNCD en la mencionada ciudad, y el agente Rudy Martínez Lebrón, miembro del Equipo Operacional en la sede central del organismo, recibieron disparos cuando realizaban labores en los mencionados lugares del Nordeste y Santo Domingo.
Por el caso del oficial, la DNCD y la Policía han desatado una tenaz persecución hasta logar el apresamiento de los encapuchados que atacaron el vehículo en que viajaba Bautista Rosario, acompañado de otros agentes. El vehículo en que se desplazaban fue impactado múltiples veces con proyectiles de armas largas.
Entretanto, por la agresión en que resultó herido el agente Martínez Lebrón son buscados los tales Deo Bolo, Ito, El Flaco, Guille el hijo de Selena y una muchacha conocida como La Morena. Todos son reconocidos vendedores de drogas, quienes la noche de este miércoles atacaron a balazos a una unidad de la agencia anti narcóticos.
El vocero de la DNCD, Roberto Lebrón, dijo que el agente herido en Capotillo sufrió la fractura del antebrazo derecho a consecuencia de un disparo con orificios de entrada y salida durante un enfrentamiento escenificado en la calle Respaldo José Martí, donde los indicados sujetos tienen en zozobra a los vecinos del sector.
El equipo antidrogas, acompañado por un fiscal adjunto del Distrito Nacional, fue recibido con lluvia de plomo, la que solamente dejó herido a Martínez Lebrón, mientras una joven agente recibió una pedrada en la pierna derecha. El agente está interno en el Hospital Central de las Fuerzas Armadas.
En los de los callejones de acceso al lugar donde operan los mencionados individuos la DNCD encontró un bulto con 29 porciones de cocaína, cuyo peso no fue especificado de inmediato, así como 6 de marihuana, además de una balanza marca Tanita. Los protagonistas de la agresión escaparon por los recovecos del barrio.
El portavoz de la DNCD, el periodista Roberto Lebrón, dijo que esos individuos están identificados hasta con sus fotografías, de modo que no tienen forma de escapar a la persecución montada en su contra por las autoridades antinarcóticos y por la Policía. Lo mejor sería, agregó, que se entreguen para ser sometidos a la justicia.
Y por tratarse de individuos que están fuertemente armados los miembros de esta institución tienen instrucciones de defenderse, tras indicar que por la magnitud del ataque de la víspera no hay dudas de que estos dispuestos a lo que sea. Los agentes se vieron obligados a realizar disparos al aire para evitar males peores.
