Ofrendas al Patricio

Ofrendas al Patricio

La patria, tan pronto vio salir el sol inició los actos conmemorativos del 191 aniversario del natalicio de Juan Pablo Duarte. Y es que un día como ayer, 26 de enero, pero de 1813, en la casa 308 de la calle Isabel La Católica nació este gran ser humano, quien desde muy joven adquirió un liderazgo que le permitió liberar a su pueblo, luego de 22 años de ocupación haitiana.

Su desarrollo personal e intelectual lo convirtieron en un hombre de múltiples facetas, pues no sólo fue ideador de la Independencia Nacional, sino que a los 21 años ingresó a la Guardia Nacional Haitiana, donde alcanzó los grados de capitán y coronel.

También fue maestro, y con un grupo de jóvenes fundó la Escuela de la Atarazana, donde impartió clase a quienes asistían. Además tuvo el acierto de convertir a sus alumnos en próceres de la Patria.

Sin duda, su ferviente amor por el país expresado en sus ideales y demostrado a través de las acciones emprendidas en compañía de ocho jóvenes, a través de la sociedad secreta “La Trinitaria”, no culminaron el 27 de febrero con la proclamación de la Independencia Nacional en la Puerta de la Misericordia, sino que cada día debe renovarse la conciencia cívica que se resume en la frase: “Dios, Patria y Libertad”.

En agradecimiento por su tenacidad para que su patria naciera con la antorcha de la libertad, con banderas en mano, y el corazón impregnado del más puro sentimiento de amor, muchos dominicanos se congregaron en la centenaria e histórica Puerta El Conde que los condujo al Altar de la Patria, donde están sus restos junto a los de Matías Ramón Mella y Francisco del Rosario Sánchez, también padres de la nacionalidad dominicana.

Algunas entidades que estuvieron presentes fueron el Instituto Duartiano, la Escuela Club República de Cuba, Jaycees’ 72, el Colegio Médico Dominicano, la Academia Militar del Caribe, la Oficina de Juventud del Ayuntamiento de Distrito Nacional, y turistas, que impresionados por los actos que allí se realizaban no dejaban de grabar las incidencias.

En el recorrido hacia el Altar de la Patria, la banda de música del Cuerpo de Bomberos de Santo Domingo entonó las gloriosas notas musicales del Himno Nacional.

Ya dentro del Altar, la solemnidad imperó. Entregas de ofrendas florales, declamaciones de poesías que hicieron estudiantes de diferentes centros educativos sellaron ese momento en que muchos dominicanos se unieron para recordar el natalicio de nuestro apóstol de la libertad.

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