Hoy 
La Sociedad Dominicana de Oftalmología y el equipo de profesionales que atendió a la ingeniera Francina Hungría defendieron ayer la aplicación de los protocolos aplicados al malogrado ojo derecho de la ingeniera.
De esta forma, los profesionales de la oftalmología salen al frente a una ola de rumores que se generó en el país sobre una supuesta mala práctica de extraer el ojo derecho que llegó totalmente vaciado.
El doctor Jaime Núñez, presidente de la Sociedad de Oftalmólogos, los doctores Nelson Mañón Castillo, Máximo Genao y Donald Hurtado, narraron a los periodistas las condiciones en las que recibieron a la paciente baleada por delincuentes, en Santo Domingo. Observamos en el lateral derecho de los huesos propios de la nariz, un orificio de entrada de bala, el cual produjo un estallido del globo ocular derecho, con ausencia de contenido del mismo, consistente en córnea, iris, cristalino, uvea, vitreo y retina, restando solamente alrededor del 70 por ciento del cuerpo escleral de dicho globo, dice el parte de prensa.
La bala siguió una trayectoria que dañó el ojo izquierdo, pero a ese ojo, los especialistas lo suturaron, para proteger una posible recuperación, insistieron.
En el ojo izquierdo, los médicos hallaron sangre en la cámara interior del órgano, lo que impedía la visión desde ese ojo.
De su lado, el representante legal de la familia de la ingeniera Hungría que es tratada en Miami, declaró que no tienen razones para emprender acciones legales, porque no existe una investigación que hable de la mala práctica.
Los profesionales de la Oftalmología fueron precisos al referirse al caso, contestaron las preguntas médicas con imágenes gráficas de ojos, pero no los de la ingeniera.
Los médicos señalaron que el único daño del que se puede hablar es el delincuencial, cometido contra una profesional joven de la ingeniería.
El equipo que atendió a la joven Hungría, herida en los ojos informó que no han sido contactados por los profesionales del área que la atienden en centros de Las Florida.
