La Organización Internacional del Trabajo (OIT) denunció hoy aquí que, desde el punto de vista laboral y social, la integración y los Tratados de Libre Comercio (TLC) generaron resultados insatisfactorios en la década de los años 90.

La OIT presentó en Santiago de Chile su «Panorama Laboral 2003 de América Latina y el Caribe», en el que afirmó que «al aplicar la vara laboral y social para medir el desempeño de la integración en América Latina, el resultado es, en general, insatisfactorio». Precisó que en la década de los años 90 aumentó el desempleo, la informalidad laboral y la pobreza, mientras que los salarios mínimos aún no recuperan su nivel de 1980.

Sin embargo, el informe de la OIT puntualizó que no es posible determinar en qué medida es atribuible esta realidad que viven los países de la región a los vacíos que dejan la integración y los TLC.

«Se abre una nueva brecha entre los avances en la protección de los derechos y la situación sociolaboral de la región que resta legitimidad a los beneficios del libre comercio», apuntó el documento divulgado este miércoles.

Precisó que la acelerada expansión de los procesos integradores y el aumento de los TLC en la década pasada, además de la puesta en práctica de políticas de apertura al exterior, no marcharon al ritmo del desempeño sociolaboral de esas iniciativas.

Recalcó que «el resultado de estos procesos en el empleo, los salarios y la situación de los grupos vulnerables ha sido magro», tras lo cual acotó que «los beneficios de la integración y el libre comercio no llegan en forma equitativa» a los trabajadores. El informe de la OIT reconoció, no obstante, que en los procesos integradores se produjeron «avances en el reconocimiento de los derechos fundamentales de los trabajadores».

Detalló que algunos grupos vulnerables, entre ellos las mujeres, los pobres y los trabajadores migrantes, «pueden ser negativamente afectados» por los procesos de integración y acuerdos comerciales, por lo cual podrían requerir de políticas compensatorias.

El desempleo promedio de América Latina, que en el primer lustro de los años 90 se situó entre 5.5 y 6.5 por ciento, se situó en 10.8 por ciento en 2002, aunque dos puntos porcentuales del aumento se deben al cambio en la medición del empleo en Brasil, acotó la OIT.

«La evidencia indica que los procesos de integración han producido un resultado insatisfactorio en más de una década, puesto que hay insuficiente generación de empleo, los salarios mínimos no han recuperado sus niveles previos y la pobreza aumentó», señaló.

De acuerdo con el organismo, el 75 por ciento de los 203 acuerdos comerciales vigentes en el mundo se suscribieron tras la Ronda Uruguay de negociaciones para la apertura comercial de la cual emergió la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 1995.

Recordó que los acuerdos comerciales contribuyeron a la apertura de las economías de la región, cuyos aranceles promedio bajaron en la década de los años 90 desde niveles mínimo y máximo de 35 y 100 por ciento a 14 y 22 por ciento en forma respectiva.

[b]DESEMPLEO[/b]

La integración comercial de paises latinoamericanos, incluyendo a México, a través de los Tratados de Libre Comercio a más de una década aceleró la expansión del desempleo, el aumento del sector informal y la disminución del poder adquisitivo de los salarios, señala la Organización Internacional del Trabajo (OIT). «El resultado de estos procesos comerciales en el empleo, los salarios y la situación de los grupos vulnerables ha sido magro y ha puesto en jaque la legitimidad de integración comercial», resalta.

Una prueba de ello, cuestiona la OIT, es que a más de 10 años de entrar en vigor los tratados de Libre Comercio en América Latina el desempleo aumentó de 5.5% a 10.8% en 2002, el empleo informal subió de 42.8% a 46.5%, el poder adquisitivo de los salarios reales de la industria y los mínimos aumentaron 1.6% y 1.3% respectivamente. «Durante los años 90, cuando se firmaron la mayoría de los tratados comerciales, de cada 10 ocupados siete fueron informales», precisa el estudio Panorama Laboral 2003 Integración Regional y Tratados de Libre Comercio elaborado por la OIT.

Concluye el organismo que los procesos de integración han producido un resultado insatisfactorio en más de una década, puesto que hay insuficiente generación de empleo, los salarios mínimos no han recuperado sus niveles previos y la pobreza aumentó.

El balance dice el estudio de la OIT «sugiere que se ha producido un deterioro del trabajo decente».

La brecha que existe entre avance en la protección de los derechos y la situación sociolaboral dificulta que se expandan los beneficios del libre comercio y permite entender el descontento y las tensiones y estallidos sociales en el área, advierte la OIT en su balance.

En los últimos años, el hemisferio americano ha avanzado a tranco veloz en materia de integración. Existen en la actualidad 18 acuerdos de integración en distintos estados de avance, lo que ha contribuido a la apertura de las economías; 75% de los 203 acuerdos comerciales vigentes hoy en el mundo han sido suscritos a partir de 1995.

Los acuerdos han contribuido a la apertura de las economías de la región, cuyos aranceles promedio bajaron durante los años 90 desde niveles mínimo y máximo de 35% y 100% a 14% y 22%, respectivamente. De acuerdo al análisis de la OIT, se observan avances en el libre comercio no siempre lineales en dos direcciones.