POR ARIDIO PERDOMO
PUERTO PLATA.- La ola de violencia y criminalidad que azota a la República Dominicana ha “tocado con crudeza” a las familias puertoplateñas, que en lo que va de año han visto caer a por lo menos 25 de sus hijos a manos de desconocidos.

La mayoría de esos hechos de sangre no ha sido esclarecido por las autoridades policiales y judiciales de esta provincia.

Desde enero hasta la primera semana de julio de este año, en esta provincia han sido asesinadas 25 personas por desconocidos o sicarios, que han utilizado armas de diferentes calibres. Hasta el momento, las autoridades no han dado con los responsables de estos hechos de sangre.

En ese período han caído asesinados abogados, ingenieros, obreros, estudiantes, empresarios, campesinos, agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas y extranjeros que llevaban años radicados en la zona turística de la costa Norte.

  También, el periódico El Faro, que circula dos veces a la semana en esta ciudad, en un trabajo de investigación periodística realizado por su redactor Félix Sosa Lantigua, señala que en el mes de marzo se registró la mayor cantidad de asesinatos, con nueve asesinatos. En febrero, un joven nativo de este pueblo y un turista de nacionalidad francesa fueron muertos a tiros por varios desconocidos, en el interior de una residencia propiedad del último, en el municipio de Río San Juan.

Las víctimas fueron Alberto Silverio González, de 28 años, quien residía en el barrio Los Núñez, de esta ciudad, y un francés no identificado por la Policía.

El dos de marzo fueron acribillados a balazos el empresario pesquero Aladino Acevedo Beard y el ingeniero Engels Sarita, cuando se encontraban frente a un edificio en construcción, en la avenida Manolo Tavárez Justo. En la acción también resultó herida de gravedad una tercera persona.

El 15 de marzo, en horas de la madrugada, se quitó la vida de un tiro a la cabeza el general de la Policía Nacional Mirogeo Reynoso Vargas, en la comunidad de Candelón, del municipio de Luperón. El día 18 del mismo mes resultó muerto de un tiro en el pecho el taxista Daniel Pérez, de 43 años de edad. El hecho ocurrió en el sector El Javillar, y como responsable del mismo fue sometido a la justicia Amauris Rodríguez Sánchez, quien alegó que se le escapó un disparo de una pistola que portaba ilegalmente.

  El 20 de marzo, dos jóvenes que conversaban en horas de la madrugada con un grupo de amigos en la calle 30 de Marzo, del sector El Borojol, de esta ciudad, fueron acribillados a balazos por varios desconocidos que se desplazaban en un vehículo con los vidrios entintados de negro oscuro. Las víctimas fueron Elvis Luna Santos y Pedro Miguel Rodríguez, de 20 y 25 años.

También resultaron gravemente heridos Marcos de Jesús Brito Cabrera, Edwin Domínguez Reynoso y Heidy Almonte Díaz. Por este hecho hasta el momento no hay nadie preso.

Cuatro días después, la joven Erika Ortiz mató de un tijerazo en el pecho a su ex marido Antonio Capellán, cuando éste acudió a su centro de trabajo, en una de las empresas de la zona franca de esta ciudad, con fines de agredirla para obligarla a seguir viviendo con él.

Una semana después, el 27 de marzo, Andrés Díaz y Miguel Díaz, oriundos de Santiago, fueron encontrados acribillados a tiros y semidesnudos en un campo de caña del ingenio Amistad, del municipio de Imbert.

Dos días después, en el mismo lugar, fue hallado el cadáver, sin cabeza, de un agente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), que prestaba servicios en Santiago, y que fue muerto en otro lugar y lanzado en el citado campo cañero. El 12 de abril, la joven Claritza Vargas, de 29 años de edad, fue asesinada a tiros por su ex concubino, Nerito Vargas, en el barrio Altos de Chavón, de esta ciudad.

Tres días después el abogado Wilson García, quien jugaba delante de su computadora, fue muerto a tiros por varios desconocidos que penetraron a su residencia, ubicada en la Urbanización El Doral, y huyeron en sendas motocicletas.

Asimismo, el 7 de junio fue asesinado a tiros en el interior de un colmadón en el distrito municipal de Montellano, el joven Rafael Gómez Sosa, oriundo de Santo Domingo, y quien llevaba meses residiendo en el lugar.

El hecho de sangre lo cometieron dos personas que luego se dieron a la fuga en un carro manejado por otro que lo esperaba a pocos pasos con el motor encendido.

El 19 del mismo mes cayó abatido a balazos en el municipio de Altamira, el cabo de la Policía Nacional Francisco Hiraldo del Rosario, quien era perseguido por una patrulla de la institución, porque alegadamente raptó, atracó y violó sexualmente a dos jóvenes, junto al raso Lorenzo Parra Acevedo.

uEl 2 de julio fue asesinado a tiros por varios desconocidos en la avenida de circunvalación Norte (malecón) el microempresario Félix Rotestán Ortiz.

  El domingo ocho, el cabo de la Fuerza Aérea Dominicana (FAD), Domingo Milanés Peña, mató en la comunidad de Camú, del distrito municipal de Montellano, a los señores Roberto Castillo Martínez y Demetrio Caraballo del Rosario e hirió de gravedad a la joven Sandra Martínez.