Por ALVIN VALDEZ
MIAMI, Florida. La pequeña isla de la Republica Dominicana es la mayor exportadora de talento para el béisbol de Grandes Ligas. Muchos criollos han participado en el Big Show, sin embargo llama la atención la poca cantidad de receptores que nuestro país ha tenido en este nivel.

Miguel Olivo es uno de ellos. El máscara regular de los Marlins de la Florida tiene el record de más cuadrangulares pegados en una temporada para un jugador oriundo de Quisqueya.

Pegó 16 el año pasado, superando a Tony Peña quien había pegado 15 tablazos de vuelta completa en la década de los 80.

Olivo se encontraba en un slump muy profundo a partir del mes de mayo y su promedio de bateo descendió más de 60 puntos durante el mismo. Esto creo un ambiente de mucha ansiedad para el jugador, pero manifiesta que encontró la falla en la mecánica de bateo y que trabaja extra para mantenerse fuera de problemas ofensivos.

“Trate de pegar jonrones y esto cambio mi swing. Mi cadera abría un poco antes y no había forma de batear los lanzamientos rompientes. Estoy mucho mejor ahora, he mejorado bastante con las practicas extras. Me olvidé de pegar jonrones y me concentraré en hacer buen contacto”, dijo Olivo a HOY.

Miguel se encuentra en su segunda temporada completa con los Marlins, evitó ir a arbitraje a principios de esta campaña y firmó contrato de un año por dos millones de dólares. Un sueldo significativo tratándose del equipo que tiene la nómina de jugadores más económica de las mayores.

Olivo batea en esta campaña .237 de average con nueve dobles, tres triples, tres cuadrangulares  y 24 carreras remolcadas en 47 partidos que ha visto acción.

El catcher de seis pies de estatura y más de 220 libras de peso explica que se siente a gusto en la Florida y que le gustaría seguir en esta franquicia.

“Este es un equipo unido y con talento joven de futuro inmediato. Estuve en San Diego, Chicago y Seattle, es muy distante de mi país esas ciudades. Desde Miami estoy cerca de mi familia y mi país. Me gustaría quedarme con los Marlins y ser parte de su desarrollo”, agregó.

Olivo también dice que no piensa en marcas personales de la ofensiva.

“No pienso en marcas personales, si llegan bien. Solo quiero jugar a diario, los números llegarán”, concluyó.