LIMA (AFP).- El nacionalista Ollanta Humala, favorito para ganar las elecciones en Perú, afrontaba ayer una rebelión de sus bases partidarias que protestan por una presunta imposición en la formación de la lista de candidatos al Congreso sin respetar sus acuerdos regionales. Un centenar de sus simpatizantes tomó el local partidario en Lima, en señal de disconformidad con la elección de los 120 aspirantes a representantes al Congreso.

“Queremos democracia y no la dedocracia”, coreaban los militantes del Partido Nacionalista del Perú que dijeron representar a una docena de regiones del interior del país y que exigieron la reformulación de la lista de candidatos al Parlamento.

Ollanta Humala, que hace cuatro meses no figuraba en los sondeos de opinión, saltó esta semana al primer lugar en la competencia electoral con 28% de la intención de voto de los peruanos de cara a las elecciones del 9 de abril, según la encuestadora Apoyo.

El candidato nacionalista, admirador del presidente venezolano Hugo Chávez y del presidente electo de Bolivia, Evo Morales, desplazó así a la derechista Lourdes Flores, ubicada ahora en segundo lugar con 25% de las preferencias.

La nueva posición de Humala ha despertado interés de sus seguidores quienes pugnan por estar en la lista de aspirantes al Congreso unicameral.

Carlos Torres Caro, candidato a la primera Vicepresidencia en la fórmula de Humala, negó la acusación de “dedocracia” al designar a los postulantes parlamentarios y sostuvo que la selección se realizó en “comicios internos transparentes y democráticos”.

“Siempre habrá protestas”, subrayó el dirigente, precisando que el proceso electoral interno ya concluyó y que se actuó “con justicia y atendiendo el requerimiento de las mayorías nacionales”.

Sin embargo, las protestas continuaban en el local partidario de parte de los dirigentes provinciales.

Las acusaciones no estaban dirigidas contra el candidato Humala sino contra Torres Caro a quien sindicaban de haber incluido en la lista, sin consultar con el líder nacionalista, a sus allegados al margen de quienes fueron seleccionados como precandidatos.

“He venido a Lima a protestar y para que se respeten las elecciones internas que se realizaron en Junín”, en la región central del país, dijo Ricardo Pecho, quien sostuvo que se ha marginado a los elegidos en su zona que representaban a los campesinos.

Pecho dijo que Humala “está siendo rodeado por oportunistas” y que se está relegando a los “verdaderos militantes”. “Humala debe alegrarse por contar con bases que quieren limpiar a la agrupación de los oportunistas, de los corruptos que lo están rodeando”, añadió.

Otro dirigente regional, Jorge Paredes, del departamento norteño de La Libertad, respaldó a su colega y pidió que se declare nula la lista aprobada por Torres Caro.

En contraste a estas opiniones Isaac Meckler, elegido para integrar la lista de postulantes, rechazó los cuestionamientos al proceso de designación.

“Este fue un acto democrático y transparente. Todos los aspirantes fuimos entrevistados reiteradamente y llenamos muchos documentos”, dijo al señalar que quienes no figuran en la lista serán convocados para ejercer “funciones donde su desempeño será más útil” si es que triunfa Humala.