Berlín (EFE).- El primer ministro israelí, Ehud Olmert, cree que la comunidad internacional es demasiado paciente con Irán y que la celebración de una conferencia internacional sobre Oriente Medio no resolverá los problemas de la zona.

En una entrevista con el semanario “Der Spigel” previa al encuentro que mantendrá el día 12 en Berlín con la canciller Angela Merkel, Olmert afirmó que las tesis y la política de Israel no han cambiado y que tampoco espera cambios en la política de Estados Unidos con su país tras la llamada “Comisión Baker”.

Entre las recomendaciones de esa comisión destacan un cambio de la política estadounidense en Irak, la celebración de una conferencia internacional para Oriente Medio, con énfasis en el conflicto israelí-palestino, y la apertura eventual de negociaciones directas con Siria.

“No espero ningún cambio en la políticas estadounidense respecto a Israel. El camino correcto para nuestras relaciones con los países árabes es la negociación bilateral”, respondió Olmert a la pregunta de si apoya las iniciativas propuestas por la Comisión Baker.

Olmert se mostró igualmente escéptico sobre un eventual contacto directo con Siria con el argumento de que “es ilusorio imaginar negociaciones con un país que apoya las operaciones subversivas del movimiento integrista palestino Hamás y de Hizbulá.

“No sé lo que hará el presidente George W. Bush con el informe de la comisión. Sólo puedo decir que en nuestras conversaciones no se habla de negociaciones estadounidenses-sirias o israelí-sirias. Yo confío en su juicio y su responsabilidad (de Bush)”, dijo Olmert.

Respecto a Irán, el jefe del gobierno israelí manifestó su descontento con la actuación de la comunidad internacional, a su juicio demasiado paciente.

   “Espero pasos dramáticos contra alguien que tiene como objetivo eliminar a Israel del mapa. Israel es un país miembro de la ONU y el hecho de que alguien abogue públicamente por eliminar a Israel es absolutamente inaceptable”, declaró.

   A la pregunta de si descarta una operación militar contra Irán, Olmert precisó que habla de “medidas eficaces de la comunidad internacional para parar el peligro que entraña Irán”.

   En una segunda formulación de esa pregunta, el primer ministro israelí respondió: “No la descarto”.

   En cuanto a la situación en el Líbano, Olmert reconoció que “no le hace feliz ver la evolución de los hechos en ese país” y abogó por el fortalecimiento de la democracia libanesa, lo que a su juicio sólo es posible “cortando el apoyo que prestan agentes exteriores, entre ellos el sirio, a Hizbulá”.