Hablar de las hermanas Mirabal es símbolo de la lucha por vida y de nunca vender su amor por la patria a organismos injerencistas que buscan establecer sus agendas en el país. Así lo expresó hoy Omayra Álvarez, dirigente juvenil y activista social al recordar el legado de Patria, Minerva y María Teresa.
«No se puede dañar la memoria de las excepcionales hermanas Mirabal. Ellos fueron mujeres que tuvieron criterio de la dominicanidad. No murieron defendiendo causas personales, ni nunca se sintieron víctimas y prefirieron no doblarse ante el régimen de Trujillo», dijo Álvarez.
La directora de Juventud Con Una Misión Santo Domingo (JUCUM-SD), aseguró que Las Mariposas no estuvieron a favor de la muerte, sino de la vida y tanto fue así, que decidieron entregar su propia vida por su convicción nacionalista. «Ellas murieron no por puntos preconcebidos, ni porque obedecían a informes de organismos internacionales», dijo.
Omayra Álvarez invitó a todas las mujeres dominicanas a recordar el 25 de noviembre a unas Hermanas Mirabal que no fueron feministas, sino femeninas y patriotas. «Ellas defendieron los valores de su país y no aceptaron imposiciones foráneas. Ellas entendieron que el derecho a la libertad, a la expresión y a que nadie los subyugara. Ellas no se pusieron a compararse con los hombres, sino que se hicieron parte con ellos para luchar para una causa tan digna como lo es no permitir seguir bajo un régimen dictatorial», puntualizó.
La destacada activista social lamentó que hoy día algunas mujeres han decidido recibir prebendas internacionales y aceptar sus imposiciones, no por amor a la patria, ni por convicción sino porque buscan satisfacerse personalmente.