La Oficina Nacional de la Meteorología informó este jueves que vigila una zona de aguaceros y tormentas eléctricas, asociada a una onda tropical, ubicada cerca de las islas de Cabo Verde, próximo a las costas Africanas, la cual tiene un 60 % para convertirse en un ciclón tropical en las próximas 48 horas.
Además, la Onamet da estricto seguimiento a la evolución y desarrollo del huracán Lee, que a las 7:00 de la mana se localizaba cerca de la latitud 16.2 norte y longitud 48.8 oeste a unos 1530 km al este de las Islas de Sotavento, Antillas Menores.
Según el informe más reciente de la entidad meteorológica, Lee se desplaza hacia el oeste/noroeste a unos 20 kph, y se prevé que continúe con este movimiento en los próximos días pudiendo presentar una ligera reducción en su velocidad de traslación.
Los vientos máximos sostenidos han incrementado a unos 130 kph, con ráfagas superiores. Se pronostica un rápido fortalecimiento, esperándose que se convierta en un huracán mayor en los siguientes dos días.
Puede leer: Tras recientes hechos violentos, CODUE dice sociedad experimenta “carga mental elevada”
Los vientos con fuerzas de tormenta se extienden a unos 150 km fuera de su centro.
El tiempo para hoy
Se espera que la vaguada continúe afectando las condiciones del tiempo sobre nuestra área, mientras se combina con el transporte de humedad hacia nuestro territorio por parte del viento del este/sureste. Por tanto, en horas de la mañana se esperan chubascos ocasionales y tronadas aisladas en provincias en la costa sur desde La Altagracia hasta San Cristóbal, luego, en la tarde, se adicionarán los efectos del ciclo diurno, por lo que habrán otros incrementos nubosos que dejarán aguaceros fuertes en puntos aislados, tormentas eléctricas y ráfagas de viento hacia provincias como: El Seibo, Hato Mayor, Monte Plata, Sánchez Ramírez, La Vega, Monseñor Nouel, San José de Ocoa, San Cristóbal, Azua, San Juan, Elías Piña, Dajabón, Independencia y Bahoruco.
Al iniciar la noche, estas lluvias empezarán a disminuir de manera gradual, esperándose que permanezcan algunos chubascos y tronadas aisladas en poblados costeros del Atlántico y el Caribe.