La Organización Nacional de Empresas Comerciales (ONEC) es otra de las entidades que expresó su oposición a los intentos de aprobar una resolución que autorizaría a una empresa de inversión extranjera establecida en la zona fronteriza a comercializar sus productos libres de impuestos.
El presidente de la ONEC, Pedro Pérez González, dijo que rechaza dichas pretenciones por entender que crearía privilegios, y que a su vez generaría distorsiones en el mercado en perjuicio de empresas formalmente establecidas, que pagan sus impuestos y que se encuentran a muy pocas horas de recorrido de la frontera.
Permitir que una empresa opere exenta de impuestos que, en muchas ocasiones significa un porcentaje superior a los márgenes de las demás industrias del sector que sí tienen que pagar sus impuestos, equivaldría a condenar al cierre de estas últimas y un factor de competencia desleal incuestionable, dijo.
Puntualizó que la ONEC siempre se ha opuesto a los esquemas de exenciones fiscales discriminatorios, sobre todo cuando van en detrimento y perjuicio de otras empresas que sí tienen que cumplir con sus obligaciones fiscales.
Dijo que entiende la importancia de promover el desarrollo de la zona fronteriza y no cabe la menor duda de que esa fue la intención de los legisladores al aprobar la Ley 28-01. Sin embargo, esta situación evidencia una vez más la imperiosa necesidad de que la misma sea sometida a revisión y modificada para eliminar estas concesiones que indudablemente provocarían daños irreparables a la industria local.
La Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) consideró ayer que las autoridades no deben autorizar la instalación de una empresa nacional o extranjera que genere competencia desleal a otras que no cuentan con los mismos beneficios fiscales.
Las frases
Pedro Pérez González
Sin temor a equivocarme, me atrevo a afirmar que el perjuicio sería mayor que el bien que podrían generar en la zona fronteriza. De nada sirve desvestir a un santo para vestir a otro; de nada serviría generar empleos en la zona fronteriza y, a la vez, provocar la pérdida de empleos en el resto del país.