La Organización Nacional de Empresas Comerciales (ONEC) respaldó la posición del Consejo Nacional de de la Empresa Privada (Conep) en el sentido de que no apoyará una reforma fiscal que no esté orientada a controlar el gasto del Estado.
El presidente de la ONEC, Antonio Ramos, reiteró que una reforma tributaria que solo persiga aumentar los impuestos traerá un impacto negativo en los sectores productivos y en la población, debido a que aumentará los costos de producción de bienes y servicios, lo que al final se traducirá en un aumento en los precios que afectará el poder adquisitivo de los consumidores.
El dirigente empresarial dijo que de hacerse una reforma tiene que ser integral, de manera que exista una disminución y reorientación del gasto corriente.
Dijo que tal y como han expresado otras organizaciones empresariales y de la sociedad civil, urge una revisión del gasto público, de manera que este se enfoque en incentivar la producción local, construir las infraestructuras que necesita el país, y en realizar las inversiones necesarias para mejorar los servicios públicos, entre los que destacó la salud y la educación.
Consideró que uno de los principales retos que deberá enfrentar el Gobierno que surja de las elecciones es garantizar que la próxima reforma fiscal que se realice contemple un ajuste en el gasto administrativo, al plantear que los recursos que ingresen a las arcas del Estado deben tener como prioridad aumentar la competitividad del país, lo cual, dijo, se logra haciendo más eficiente el gasto.
El Conep afirmó que es irrelevante si el informe del Fondo Monetario Internacional (FMI) que circula en los medios es falso o no falso, como dijo el exministro de Hacienda, Vicente Bengoa, pues la posición de la cúpula empresarial es la misma, que no apoyan un parche tributario, sino una reforma fiscal integral.