ONU arde por tema “armas biológicas”

ONU arde por tema “armas biológicas”

Asamblea General de la ONU

La supuesta producción de armas biológicas en Ucrania, una acusación de la que Rusia responsabiliza a Estados Unidos, llegó ayer, viernes, al Consejo de Seguridad de la ONU, donde los debates no dejaron muchas certezas, salvo que se trata sobre todo de una batalla informativa o del relato.

Sonaban en la sala los ecos de Colin Powell -cuyo nombre fue citado por el embajador ruso-, cuando en 2003 presentó ante el Consejo las presuntas pruebas definitivas de que el Irak de Sadam Huseín fabricaba armas químicas de destrucción masiva, acusación que resultó infundada pero sirvió para justificar la invasión del país árabe por tropas estadounidenses.

Puede interesarle: Ucrania dice Rusia atacó un hospital para niños

El embajador Vasili Nebenzia, convertido en la cara diplomática de Rusia, presentó ante el Consejo lo que dijo era solo “una pequeña parte” de la gran cantidad de pruebas de que el Departamento de Defensa estadounidense desarrollaba en treinta laboratorios de Ucrania.

Le puede interesar también: ONU dice no tener constancia de armas biológicas en Ucrania

La ONU aseguró este miércoles que no tiene ninguna constancia de la existencia en Ucrania de programas ilegales de armas químicas y biológicas, tal y como ha denunciado el Gobierno ruso.

Preguntado al respecto, el portavoz Stéphane Dujarric dijo a los periodistas que la organización no tiene información que confirme esas acusaciones rusas.

Además, apuntó que la Organización Mundial de la Salud (OMS), que viene trabajando directamente con el Gobierno ucraniano, no tiene conocimiento de ninguna actividad por parte de Kiev “que sea inconsistente con sus obligaciones con base en tratados internacionales, incluyendo sobre armas químicas o biológicas”.

En los últimos días, el Gobierno ruso ha asegurado que su Ejército ha descubierto en Ucrania pruebas de una “eliminación de emergencia” de rastros, algo que apunta a la existencia de un supuesto programa biológico-militar desarrollado en Ucrania y financiado, según Moscú, por Estados Unidos.