ONU enfrenta problemas para distribuir ayuda

ONU enfrenta problemas para distribuir ayuda

GINEBRA (AFP).- La ayuda internacional a las víctimas del maremoto en Asia fluye hacia la ONU, que registró una cifra récord de países donantes, pero enfrenta grandes problemas logísticos para llegar a las poblaciones damnificadas. Una semana después de los tsunamis, Naciones Unidas ya recibió promesas de donaciones por un «monto sin precedentes» de 1.500 millones de dólares, según un responsable de la ONU en Ginebra.

«Es la cifra que la ONU consigue generalmente durante un año para sus operaciones humanitarias» en el mundo entero, subrayó Elisabeth Byrs, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas.

«La ayuda fluye, nunca se vio nada igual», explicó.

Como punto de comparación, el secretario general de la ONU Kofi Annan había lanzado el 11 de noviembre un pedido de fondos anual de 1.700 millones de dólares para ayudar a 26 millones de personas en 24 países africanos, los Territorios Palestinos y Chechenia.

Byrs precisó que la ayuda para las víctimas de los tsunamis no incluía los préstamos (como los del Banco Mundial o el Banco Asiático de Desarrollo), las contribuciones materiales (medios de transporte, material médico, alimentos) o la asistencia bilateral acordada en forma directa a los países afectados.

«Todavía no tenemos el dinero en el bolsillo. Se trata de promesas y compromisos» que deberán concretarse una vez que la ONU lance un llamado global y formal de fondos a los donantes el 6 de enero, explicó.

El coordinador de la ONU para la ayuda de emergencia, Jan Egeland, había estimado el sábado en 2.000 millones de dólares el monto global de ayuda pública ya prometida, en el marco de la ONU o a título bilateral.

Entre las donaciones más importantes se encuentran las de Japón (500 millones de dólares) y Estados Unidos (350 millones). Por su parte, Dinamarca, que elevó el lunes a 75,5 millones de dólares el monto de su ayuda, ha hecho la contribución per cápita más alta del mundo hasta el momento.

«Ahora la prioridad es llevar y distribuir» esta ayuda masiva, continuó Byrs, quien reconoció que las agencias humanitarias enfrentaban «desafíos logísticos» en las zonas afectadas: falta de camiones, combustible y capacidad de almacenamiento; rutas y puentes destruidos; aeropuertos fuera de servicio.

Los maremotos del 26 de diciembre dejaron unos 145.000 muertos y millones de damnificados en Asia. Muchas de estas personas aún no recibieron ninguna asistencia.

El miércoles pasado, la ONU había lanzado un primer pedido de 130 millones de dólares a los donantes.

El secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, lanzará un pedido global de fondos mucho más importante el 6 de enero, en ocasión de una reunión en Yakarta de los países afectados y los principales organismos internacionales proveedores de fondos.

El 11 de enero, una conferencia auspiciada por la ONU reunirá en Ginebra a los países donantes, que podrán precisar y eventualmente completar sus contribuciones.

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