CARACAS, Venezuela. El arresto domiciliario otorgado al dirigente Daniel Ceballos fue recibido como un gesto positivo en Venezuela, pero la oposición aún reclama el cese de las inhabilitaciones y la liberación de los presos políticos para restablecer la normalidad de cara a las elecciones parlamentarias.

Al grito de “esperanza para Venezuela, esperanza, libertad para Venezuela” Ceballos, exalcalde de la ciudad suroccidental de San Cristóbal, saludó el miércoles a la prensa desde la ventana de un apartamento ubicado en el segundo piso de un edificio de ladrillos y celebró el recuentro con su esposa y sus tres hijos pequeños después de casi 17 meses de encarcelamiento.

En un corto discurso el dirigente, con una abundante barba y vestido con chaqueta deportiva, dijo desde la ventana que esperaba que el “paso positivo” que dio la Fiscalía General para lograr su arresto domiciliario “lo de para todos los presos políticos”.    Un tribunal local otorgó la víspera a Ceballos, de 31 años, una medida de arresto domiciliario mientras enfrenta un juicio por el delito de rebelión por su supuesta vinculación con las violentas protestas que se registraron el año pasado en San Cristóbal.

El dirigente fue trasladado la noche del martes por los cuerpos de seguridad desde una sede de la policía política, donde permanecía preso, hasta un edificio en el este de la capital donde cumplirá el arresto domiciliario.