La Oficina Para el Reordenamiento del Transporte (Opret) informó que el contrato para la reconstrucción del trébol entre las avenidas San Vicente de Paúl y Venezuela está a punto de ser firmado.
Explica que el trébol de la avenida San Vicente de Paúl había sido intervenido por un contratista que ganó mediante licitación la reconstrucción del espacio, pero luego no pudo hacer el trabajo con los requerimientos establecidos por la ley.
Según una nota del departamento de comunicaciones del organismo, esa falla, precisa, llevó a la Opret a retirarle el contrato y por consiguiente, convocar a una segunda licitación.
“Se realizó una nueva licitación, se adjudicó y ya el contrato está en proceso de firma; es preciso recordar que es un contrato para continuar los trabajos ya que había un contratista que había iniciado”, explica la Opret. Esta zona ha sido convertida en depósito de escombros y residuos sólidos, y una parte, al norte, en estacionamiento de vehículos.
Además, en esa zona se plantaron los soportes para un puente peatonal, hace varios años, que no concluyeron las autoridades municipales.
En cuanto al trébol al Oeste del puente Francisco del Rosario Sánchez, en el Distrito Nacional, explica no se contempla ningún trabajo, ya que la Opret no ha intervenido en la parte sur del espacio en los últimos años, aunque al norte ubicó la estación Eduardo Brito de la línea 2 del Metro.
El área entre las avenidas Francisco del Rosario Sánchez y Padre Castellanos, se observa abandonada y las vías que la circundan convertida en estacionamiento de camiones concreteros las 24 horas.
De igual modo, es un punto de acumulación de residuos sólidos de los vecinos del lugar, de donde los camiones del Ayuntamiento del Distrito Nacional, recolectores las retiran diariamente.
Sobre el espacio entre la Padre Castellanos y la Josefa Brea, donde hubo un parque infantil (Canquiña) señala que los trabajos son múltiples, aunque no especifica.
Prevé una solución integral en ese lugar, donde funciona la estación Horacio Vásquez, que satisfaga la demanda del parque infantil, asegure el tránsito vehicular y de las personas en condiciones seguras.
Aclara que ese tipo de solución integral rebasa los límites de competencia actuales de la Opret.
En el área donde hubo un parque infantil (Canquiña) señala que los trabajos son múltiples y que se encuentran fuera del alcance del organismo.