WASHINGTON (EFE).- La Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó ayer de que elabora planes para afrontar una posible pandemia provocada por una nueva cepa de gripe, más virulenta y mortal, que amenaza a los países del continente.
«Varios países, en particular los del Cono Sur, han estado trabajando en la elaboración de planes para los preparativos» de lucha contra esa eventualidad, dijo Otavio Oliva, asesor regional de la OPS en enfermedades virales.
«Otros están empezando el proceso. Pero todavía hay muchas cosas por hacer», señaló Oliva tras dar a conocer que se está prestando cooperación técnica para ayudar a los países a que avancen en esos preparativos.
Este trabajo se basa en una serie de guías formuladas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1999.
La OMS está actualizando esas normas para diseñar un «plan nacional modelo» para preparativos en casos de pandemias.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), de Atlanta (Georgia), también están apoyando esos esfuerzos.
El llamado Plan de Influenza Pandémica Canadiense, que sigue las normas de la OMS, «proporciona un buen ejemplo de un plan desarrollado en forma completa» para hacer frente a estas circunstancias, dijo Oliva.
Añadió que «aún el mejor plan no puede prevenir los casos una vez que la epidemia ya se desató, pero sí puede reducir al mínimo el impacto».
La OPS y los CDC realizarán un taller en Atlanta, en mayo, para los países de la región y en el que se capacitará en epidemiología y vigilancia de la influenza y otros virus respiratorios.
También brindará una oportunidad a los países para comparar los progresos alcanzados en la elaboración de los planes de preparativos pandémicos.
Una actividad similar se celebró en Río de Janeiro en abril de 2004 sobre la vigilancia y la respuesta a las enfermedades víricas respiratorias epidémicas que se centró en el Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS) y la gripe aviar.
Los preparativos pandémicos de la OPS incluyen el fortalecimiento de la capacidad de los países en la vigilancia epidemiológica de la influenza, provisión y distribución de vacunas y medicamentos antivirales, preparativos de servicios de salud, capacidad y respuesta de los hospitales y la comunicación en situaciones de riesgo.
El plan pandémico canadiense que se tiene como modelo, observa que «la intervención de salud pública más eficaz para mitigar la repercusión de una pandemia es mediante la inmunización con una vacuna eficaz contra el virus nuevo, y, en menor grado, mediante el uso de los medicamentos antivirales».
La OPS explicó en un comunicado que las pandemias de gripe pueden ocurrir cada 10 ó 50 años, y que la última se desató en la región entre 1968 y 1969.
Los expertos mundiales de salud pública han alertado de que la epidemia de influenza aviar en Asia ha puesto actualmente al mundo en un riesgo mayor de una nueva pandemia, más que en cualquier otro momento en las décadas recientes.