Anuncio más impactante fue la revisión contrato Autopista del Nordeste

El pasado sábado el presidente Abinader acudió por primera vez a la Asamblea Nacional en la reunión conjunta de las dos cámaras legislativas para proceder a su rendición de cuentas de su ejercicio ejecutivo de cuatro meses que se había iniciado el 16 de agosto pasado.

Como siempre fue un discurso preñado de promesas y de realizaciones de sus seis meses de gestión, ensombrecida por la violenta manifestación de la pandemia más mortífera que haya atacado a la humanidad en las pasadas décadas.

Ni la gripe española en 1918 ocasionó tantas muertes y esta pandemia ya tiene un registro de más de 2,5 millones de muertos y 113 millones de contagiados en todo el mundo.

El mensaje presidencial como siempre tuvo sus detractores en la acera de la oposición que no solo encontró nada positivo y que para muchos era una continuación de realizaciones de la anterior administración del PLD.

Para los seguidores fieles del Gobierno y nuevas bocinas que todavía no sacan la cabeza en todas sus dimensiones, y también para los empresarios, fue muy útil y acertado, esto es lo que se estila para alabar las palabras del Presidente de turno.

Los supuestos analistas y críticos independientes en sus pareceres fueron bastante sensatos y hasta lo encontraron muy ilustrativo y adecuado al momento que vive el país.

Como era natural, el presidente, le dedicó la mayor parte del mensaje a destacar los esfuerzos que se han hecho para enfrentar con éxito la pandemia.

Destacó los logros alcanzados después de la llegada de casi un millón de dosis de la vacuna aplicándose con éxito en los grupos prioritarios de enfermeras, médicos policías y personas vulnerables enfrentando el ataque de la covid-19.

Con la llegada de la vacuna china hay otro ánimo en las autoridades desarrollando su programa de vacunación ajustado a un programa muy estricto.

Pero a lo mejor se altera al llegar al punto de la masificación cuando se concluya con los grupos vulnerables de ancianos y de los combatientes de primera línea del personal sanitario.

A lo mejor al generalizarse la vacunación de los demás grupos se altere el orden y surja el clásico y natural desorden de quienes tratan de que se les vacune delante de otros que a lo mejor tienen varias horas esperando su turno como ya esta ocurriendo.

De todas maneras el Presidente detalló muchas obras que pretende iniciar este año en especial con la modalidad de la alianza publico-privada.

Así mismo continuar muchas obras detenidas en su ejecución por los amarres legales que dejó la anterior gestión del PLD y continuando aquellas que no presentan trampas legales y con contratos bastante transparentes como es la circunvalación de Baní y de San Francisco de Macorís y terminar la de Azua.

Concluir otras vías que ya estaban iniciadas como la carretera de Rancho Arriba a San José de Ocoa y Hato Mayor a Sabana de la Mar. Otras iniciadas como la ecológica y la hípica en Santo Domingo Este e iniciar la del Ambar con la modalidad público-privada sin que se cuele un peaje sombra

Sin embargo, el anuncio de más impacto fue de oírle decir al presidente Abinader que se va a revisar el famoso contrato del peaje de la Autopista del Nordeste que hasta ahora ha beneficiado a sus constructores con el peaje sombra con mas de 26 mil millones de pesos y para este año se espera que reciban graciosamente unos cuatro mil millones de pesos.

Este contrato se parece al que existía con la empresa procesadora del oro Cotuí que solo dejaba al país unos pequeños despojos.

Fue un contrato que se firmó sin leerse similar al del peaje sombra de la autopista de Samaná.

Fue notable y admirable el perfecto manejo del discurso en que la lectura desde el teleprompter no dejó espacio para vacilaciones y permitió ver a un jefe del Estado en perfecto control del escenario y una presencia dominante que habla muy bien de su preparación.

Fueron muchos los planes expuestos y con seguridad de que algunos se iniciarían este año si hubiese dinero.

Pero surge la duda si el sector privado está en condiciones de asumir ese compromiso cuando sus empresas por efecto de la pandemia están casi al borde de la quiebra, lo cual indica que no hay dinero para materializar los sueños de un dinámico emprendedor obligando a ajustar sus desesperos desarrollistas a la realidad de estar encadenado a la pandemia por efectos de la vacunación que se realiza sin tregua ni descanso a todos los rincones del país.

Fue notable y admi- rable el perfecto manejo del discurso por el presidente Luis Abinader.