Hoy 
POR SANTIAGO GONZÁLEZ
DAJABON.- El Presidente de la República ordenó ayer al Ejercito Nacional detener en lo inmediato, el robo de ganado, problema definido por los afectados como un asunto grave que pone en peligro a los criadores de esta zona.
Yo aprovecho la ocasión para instruir a las autoridades militares de la zona, para que se le confiera al tema del robo de ganado, carácter prioritario y de la máxima importancia, dijo el doctor Leonel Fernández, en respuesta a una demanda del sector ganadero representado por el ingeniero Ramón Cordero.
El mandatario solicitó a los militares detener los actos de pillaje en contra de los ganaderos de la zona, los que según añadió, representan un sector importante del desarrollo económico.
Que cuando yo vuelva que me digan aquí, Presidente, efectivamente se le ha puesto coto al robo de ganado, enfatizó.
El doctor Fernández había escuchado atento los planteamientos de los criadores de ganado, quienes dijeron ser afectados por el robo de reses que luego son llevadas al vecino Haití, así como por la falta de pastos y agua.
Tenemos que aprovechar, Presidente, las exigencias de los mercados internacionales para el desarrollo ganadero, pero con el robo de nuestras especies no podemos competir, dijo Cordero.
Habló durante una audiencia popular en esta localidad, donde escuchó a representativos de unos 12 sectores, a quienes prometió diversas obras y expuso la situación en la que recibió la situación económica del país.
El presidente Fernández estuvo acompañado del secretario de la Presidencia, Danilo Medina; la secretaria de Educación, Alejandrina Germán; el secretario de Interior y Policía, Franklin Almeyda; el secretario Obras Públicas, Freddy Pérez y el secretario de Agricultura, Amílcar Romero, entre otros.
El presidente Fernández llegó cerca del medio día a esta localidad en helicóptero y luego de saludar a parte de los militares de la dotación Fernando Valerio, se dirigió a la gobernación provincial donde juramentó al consejo provincial de desarrollo.
La entidad es presidida por la gobernadora, Sonia Mateo Espinosa, Gregorio Reyes, el cura Regino Martínez, Demetrio Senfleur, José Miguel Rosario, Raymundo Abad y los coroneles de la Policía y del Ejercito, entre otros. A la juramentación no asistió el sacerdote Martínez.
