Entidades internacionales, bajo el  concepto de un nuevo esquema  de asistencia escolar,   se ofrecieron para desarrollar en Haití  un programa de   desayuno  basado en un menú de galletas nutritivas  y jugos concentrados de frutas, los que contienen  todos los nutrientes que requiere una persona en una comida.

Ambos alimentos, con la asesoría de organismos internacionales y de expertos de la Universidad de Illinois, serían elaborados por microempresarios haitianos,  lo que, a la vez,  ayudaría al vecino país a fomentar la creación de empleo, además de alimentar adecuadamente a los estudiantes.

Se proyecta que este  programa  abarque un millón de estudiantes haitianos, aunque en principio empezaría como un plan piloto en varias escuelas.

Los detalles los ofreció a este diario Will Lajara, quien trabaja como asesor en esta materia de la Universidad de Illinois, entidad que apoya dicha iniciativa.

Explicó que este  programa de la asistencia se está diseñando en conjunto  con la citada universidad, el Laboratorio de Investigación de la Soya y una entidad privada  denominada Iniciativa Mundial para Uso de la Soya en la Salud Humana.

El Banco Mundial  y el Programa Mundial de Alimentos prometieron al gobierno de Haití llevar la cobertura económica  a un millón de estudiantes, que recibirían desayuno basado en galletas y jugos, que serían servidos por madres de los mismos alumnos, explicó Lajara.

Dijo que una de las exigencias del programa que se está diseñando   es que sean las madres de los estudiantes que realicen la labor de distribución de estos alimentos en las escuelas, para lo cual, ellas se rotarían los días de trabajo.

En su opinión, el nuevo reto de las autoridades será que las características nutricionales de esos  alimentos sean respetadas como originalmente fueron diseñadas para los estudiantes beneficiarios.

Explicó que el proyecto en cuestión plantea el desarrollo de opciones de alimentos fortificados de alto contenido energético y proteicos.

Se proyecta que en cada región de Haití haya un  microempresario productor de galletas, dijo.

La clave

Desayuno haitiano

El programa que  están diseñando reemplazaría el desayuno escolar haitiano, el cual ahora se denomina  Cantinas Escolares en Haití. Este fue creado hace alrededor de diez años, para finales de 2009 cubría 250,000 estudiantes. El nuevo esquema de comida escolar que se proyecta para Haití garantizaría los estándares de calidad adecuados, dijo Lajara.

Nutrición

La galleta propuesta en el nuevo esquema de desayuno escolar de Haití sería  fortificada por los propios reposteros que la fabriquen. Tendría un contenido de un 15% de proteínas, 13 vitaminas y 10 minerales, explicó Lajara.

En ese sentido,  Lajara agregó que este es el tipo de galleta de mayor uso en ocasiones de emergencias alimentarias en el mundo por parte del Programa Mundial de Alimentos. Este producto tiene una duración de hasta un año sin dañarse, añadió Lajara.

En el programa de asistencia escolar que se aplicaría en Haití  se propone que a los productores de los alimentos que se servirán en las escuelas se les done  las materias primas que usarán en su elaboración, dijo.

La tecnología desarrollada al respecto por consultores tiene la bondad de permitir que los productores informales en países que requieran ayuda humanitaria elaboren con ingredientes  e instrumentos simples de cocina una galleta cuya composición final se ajusta a los estándares establecidos en ese sentido por las agencias internacionales especializadas en la materia, señaló Will Lajara.