Al igual que el reverendo Martin Luther King (aunque guardando las circunstancias, el tiempo y el lugar), jóvenes comunitarios, religiosos y deportitas de Herrera, en el municipio Santo Domingo Oeste, tienen un sueño: ver su entorno libre de delincuencia, violencia, desempleo, deserción escolar y drogadicción.
Este lugar, que tuvo sus años de gloria con la proliferación de empresas que dinamizaron la economía, hoy es golpeado de manera inmisericorde por la falta de oportunidades.
El microtráfico es una vía fácil de ganar dinero que día a día arrastra con mayor fuerza a la juventud de la comunidad. De esta actividad se desprenden la delincuencia, la violencia y otros males. La ingesta de alcohol producto de la proliferación de “drinks” o “liquor store” es otro aspecto preocupante. Pero no todo está perdido. Líderes juveniles de la comunidad, durante un encuentro sostenido el día 4 elaboraron un manifiesto en el que acordaron el inicio de una gran cruzada municipal para hacer valer sus derechos ciudadanos.
En La Esquina Joven de Hoy, Andrés Travieso, director de la Fundación Voluntad Educativa (Funve), explicó los alcances de la iniciativa.
“Tenemos un sueño; ver a nuestro presidente Danilo Medina inaugurar la Casa de la Juventud en Herrera, construir un centro comunal en Buenos Aires, un polideportivo en Las Palmas y una escuela laboral en Guajimía. Soñamos con canchas, bibliotecas digitales en los barrios El Libertador, Duarte, Enriquillo, Las Rosas, Bayona y en todos los demás sectores de la demarcación”, manifestó.
Asimismo, dijo que albergan la esperanza de que el primer mandatario emita un decreto para crear el Programa Especial de Atención a la Juventud Desocupada (Proesa-Jude), con el propósito de erradicar la deserción escolar y de disminuir el desempleo juvenil.
Refirió que es inaceptable que la República Dominicana aparezca en el décimo quinto lugar en desempleo juvenil de una lista de 192 países del mundo.
“El panorama laboral de Herrera y el país es un cielo nublado y sepan ustedes que la exclusión social provoca lluvia. Lluvia de sangre. Y ya en Herrera comenzó a llover. En los meses transcurridos han muerto decenas de jóvenes en hechos delictivos”, observó.
En el conversatorio en la parroquia Espíritu Santo, de la avenida Isabel Aguiar, el vicario Raúl Santos hizo referencia al trabajo para rescatar y alejar de los vicios a los muchachos de la comunidad.
En ese mismo tenor se pronunció la joven de la Pastoral Juvenil Alondra Martínez, quien destacó la importancia de educar en valores y el fortalecimiento del núcleo familiar.
En tanto, el comunicador Miguel Martínez abordó lo relativo al estancamiento del desarrollo económico del municipio, producto del cierre de las empresas.
De igual manera, se quejó de la crisis en el servicio eléctrico. Denunció que las tandas de apagones se extienden hasta por 20 horas diarias.
Los jóvenes recordaron que la Constitución en su artículo 55, numeral 13, reconoce el valor de este segmento como actores estratégicos en el desarrollo de la Nación. “El Estado garantiza y promueve el ejercicio efectivo de sus derechos, a través de políticas y programas que aseguren de modo permanente su participación en todos los ámbitos de la vida nacional y, en particular, su capacitación y su acceso al primer empleo”.
Sin embargo, entienden que poco se hace para cumplir con ello. Expresaron que también la Ley General de
Juventud (49-00), en su artículo 20 consigna que los jóvenes tienen derecho a la educación formal regulada por el Estado, por lo que es su responsabilidad disponer de lo que fuere necesario a los fines de garantizar este derecho.
Agregaron que de igual manera el artículo 25 dispone que los dominicanos tienen derecho a incorporarse en las distintas actividades y ramas productivas, así como que se propicie acceso a empleos justos y estables que permitan su sustento y desarrollo, para lo que el Estado velará, a fin de que no sean objeto de ninguna discriminación por su condición de jóvenes.