Cerca de mil dirigentes y activistas de organizaciones sociales, académicas, comunitarias, defensoras de los derechos humanos y de la sociedad civil, realizaron hoy una manifestación frente al Ministerio de Salud en reclamo de la adopción urgente de las medidas necesarias para evitar que las personas que acuden a los hospitales públicos sigan muriendo de enfermedades prevenibles, debido al «colapso» del sistema sanitario nacional.
La Alianza por el Derecho a la Salud (ADESA), entidad auspiciadora de la manifestación, entregó un documento dirigido a la ministra de Salud, Altagracia Guzmán, en el que advierte que ni una persona más debe morir por negligencia o deficiencia de los servicios sanitarios y hospitalarios, como acaba de ocurrir en la principal maternidad del país, donde murieron 14 recién nacidos.
El documento fue leído por Roque Félix, vocero de la ADESA, quien advirtió que la búsqueda de solución a la crisis del sistema de salud tiene que convertirse en una prioridad nacional.
Roque Félix analizó las consecuencias y las causas de la problemática sanitaria del país y precisó que el bajo financiamiento estatal, el desorden administrativo y gerencial, la privatización de hospitales estatales y la prevalencia de un sistema de salud injusto explican el drama que se vive día a día en los hospitales.
“Esta situación es insoportable y requiere de soluciones a corto, mediano y largo plazo”, enfatizó.
La protesta, denominada Parada Cívica por el Derecho a la Salud, fue respaldada por cerca de 40 organizaciones.
Demandas. Entre las demandas especificas que hacen están que se eleve la inversión pública en salud a por lo menos el 5% del Producto Interno Bruto (PIB) y que los centros de atención primaria, las policlínicas y los hospitales públicos sean abastecidos de inmediato de medicamentos, insumos y equipos, de acuerdo con estándares y los requisitos de habilitación establecidos por el Ministerio de Salud.
También exigen que el plazo para las citas médicas con especialistas no sea mayor de dos semanas y se establezca un mecanismo efectivo para evitar el reenvío de citas, que se elimine el cobro que hacen a los pobres los llamados hospitales autogestionados y que cese la discriminación en la atención.
Además, que todos los hospitales públicos presten servicios gratuitos a la población que lo requiera, independientemente de que estén o no afiliados al SENASA, y que se termine la reconstrucción de hospitales iniciada hace tres años y medio.
Por otra parte, solicitan que se elimine el copago que las ARS han impuesto en el funcionamiento del seguro familiar de salud, ya que esto afecta el gasto de bolsillo de los asegurados del régimen contributivo.
De igual forma, «que se saque la politiquería y la corrupción de la administración hospitalaria y que se designen los puestos de gerencia y dirección por concurso de oposición y méritos profesionales, no por fidelidad político-partidaria».
Entre las organizaciones que participaron en la parada cívica están el Centro Bono, el Movimiento Campesino Dominicano, la Asociación
Nacional de Mujeres del Campo, el Movimiento de Mujeres Trabajadoras, la Unión de Trabajadores Cañeros, el Centro para el Desarrollo y la Educación, la Articulación Nacional Campesina y ACOPRO.
También participaron el Movimiento Reconocido, el Movimiento de Mujeres Dominico Haitiana, la Fundación Solidaridad, la Fundación Derechos Vivientes, el Instituto de la Salud, los comités de salud de Jimaní, Dajabón, Elías Piña, Verón y Duvergé, entre otras.