Himno de Del Monte-Alfonseca sonó antes que el de Prud-Home y Reyes
El ministro de Educación, Roberto Fulcar, ha dispuesto que ningún alumno se graduará de bachiller si no se sabe las notas completas del Himno Nacional. La declaración del funcionario ha generado reacciones diversas por el carácter impositivo de la misma, y además, por la poca difusión que ha tenido el aprendizaje del canto patrio.
A finales de su primer mandato, en el año 1934, el general Rafael L. Trujillo, promulgó una ley que declaró oficial el himno que 37 años antes habían compuesto los insignes maestros José Reyes y Emilio Prud-Homme, y al mismo tiempo lo declaraba como “único e invariable”.
Esta versión del himno se tocó y se cantó por vez primera en agosto del año 1883 en ocasión de los actos conmemorativos del aniversario de la Restauración de la República. Pero es preciso y oportuno aclarar que este no fue el primer himno patriótico que se compuso en el país.
La misma noche de la proclamación de la Independencia Nacional, en 1844, el trinitario Félix María del Monte, y el músico Juan Bautista Alfonseca entregaron el himno que nuestra historia registra como la “canción dominicana”.
Las notas de Félix María y Juan Bautista, contrario a lo sucedido con las de Reyes y Prud-Homme, no caló en el sentir del pueblo y no llegó a alcanzar el reconocimiento oficial. Las autoridades de turno consideraron esa segunda versión del himno como “un canto antihaitiano y prohispánico, carente por completo de genuino sentimiento dominicanista”.
En los primeros años de su creación, el Himno Nacional tuvo poca difusión, apenas se escuchaba en la ciudad capital, específicamente el 27 de febrero y el 16 de agosto de cada año, consagrados a la conmemoración de la Independencia y la Restauración de la República. Esta versión original tiene 12 estofas, pero solo se cantan cuatro en los centros educativos y en actos sociales. Ahora se ha dispuesto la incorporación de las ocho estrofas faltantes, desconocidas todas por la población.
El maestro José de Jesús Ravelo sostiene que fue en 1894, el año en que se celebró el cincuentenario de la Independencia Nacional, cuando realmente se inicia la popularidad del Himno, debido a las muchas veces que hubo que ejecutarlo para solemnizar las actividades de esa celebración.
Tres años después, en agosto de 1897 el Congreso Nacional declaró oficialmente, mediante ley, el himno de Reyes y Prud-Homme, pero el dictador Ulises Hereaux (Lilís) engavetó la ley en lugar promulgarla, lo que confirió oportunidad a Trujillo de proclamar de manera definitiva el Himno, el 30 de mayo de 1934.
Aunque el general Trujillo oficializó el himno, le fue imposible conseguir que en la canción se incorporaran versos laudatorios a su persona, muy a pesar de las sugerencias de escritores y poetas serviles al régimen que propusieron insertar el nombre del dictador en una de las estrofas del canto oficial.