Houston (EEUU). La jornada de las Grandes Ligas permitió al dominicano David Ortiz brillar con luz propia y conseguir marcas en las mayores, gracias, una vez más, al poder de su bate.

Mientras que el venezolano José Altuve no se quedó atrás y también logró nuevos números en las Grandes Ligas, y el cubano novato José Abreu se encargó de encender la lucha de las carreras remolcadas en el gran circuito del béisbol profesional.

Ortiz pegó dos jonrones, incluyendo uno de dos carreras en el décimo episodio, y llevó a los Medias Rojas de Boston a un triunfo por 5-3 sobre los Orioles de Baltimore, campeones de la División Este de la Liga Americana.

El veterano toletero dominicano, que llegó a los 34 cuadrangulares, mandó la pelota fuera del parque en el cuarto episodio contra el abridor Kevin Gausman, sin corredores en el camino.

Para el dominicano fue su sexto juego con al menos dos vuelacercas en lo que va de la campaña y el número 47 desde que llegó a las Grandes Ligas. Ahora con 34 vuelacercas y 102 carreras remolcadas, impuso marca de equipo al mejorar sus propios números de 30-100, y al mismo tiempo superó al legendario Ted Williams.

A sus 38 años, Ortiz es el bateador de más edad en las Grandes Ligas que se va con marca de al menos 30-100 desde que Frank Thomas lo hizo también en el 2006 con los Medias Blancas de Chicago.

El dominicano también se colocó segundo, empatado con Jim Rice, al conseguir al menos 100 remolcadas en ocho campañas con los Medias Rojas, a sólo una de Williams, que llegó a las nueve. Además sus 465 vuelacercas lo empatan con Dave Winfield en el trigésimo tercer puesto de la lista de todos los tiempos. Con el mismo protagonismo estuvo Altuve, que destacó en la derrota de los Astros de Houston por 5-10 contra los Marineros de Seattle.

Altuve, líder de imparables en las Grandes Ligas, se recuperó después de haberse ido de 6-0 el jueves, y esta vez pegó tres indiscutibles.

El segunda base venezolano llegó a 216 hits en lo que va de campaña, la mejor que ha logrado un pelotero en su posición desde que le panameño Rod Carew conectó 218 en la campaña de 1974.

Para Altuve fue su juego número 24 con al menos tres imparables en lo que va de temporada, impone marca en la franquicia y empata a su compatriota Magglio Ordóñez con más hits conectados por un venezolano en la historia de las Grandes Ligas.

También brillando con luz propia el cubano Abreu llegó a 104 carreras remolcadas en la temporada durante la victoria de los Medias Blancas por 4-3 sobre los Rays de Tampa Bay. Abreu remolcó una carrera y entró de nuevo en la lucha por el liderado de las Grandes Ligas en esa faceta del juego, donde ahora ocupa el tercer lugar, empatado con el venezolano de los Tigres de Detroit, Miguel Cabrera y Nelson Cruzo, el toletero dominicano de los Orioles de Baltimore, ambos también con 104 carreras impulsadas.

Los tres se encuentran detrás de Mike Trout (107), de los Angelinos de Los Ángeles, y el mexicano de los Dodgers, Adrián González (106), respectivamente.

Desde el montículo, el abridor colombiano José Quintana (9-10) trabajó siete episodios y un tercio, aceptó nueve imparables, un jonrón y tres carreras para acreditarse el triunfo Quintana controló a 29 enemigos con 104 lanzamientos, 68 enviados a la zona del “strike”, y dejó en 3,22 su promedio de efectividad.

En la derrota el bateador designado dominicano Edwin Encarnación llegó a 33 jonrones para los Azulejos de Toronto, que perdieron 3-5 contra los Yanquis de Nueva York. Encarnación botó la pelota fuera del parque en el primer episodio con un corredor en el camino, cuando había un “out” en la pizarra.

El guardabosques venezolano Oswaldo Arcia y el bateador designado puertorriqueño Kennys Vargas pegaron sendos jonrones y los Mellizos de Minnesota vencieron 5-4, en 10 episodios, a los Indios de Cleveland. Arcia (19) pegó batazo de cuatro esquinas solitario en el tercer episodio contra los lanzamientos del abridor Trevor Bauer, que buscaba el primer “outs” de la entrada.

Mientras que Vargas (9) pegó de vuelta entera en el cuarto, sin corredores en los senderos, también contra los lanzamientos de Bauer, cuando había dos “outs” en el episodio. El cubano Yasiel Puig (15) se voló la barda en el sexto episodio contra el relevista Dan Straily con dos corredores en circulación, y ayudó a los Dodgers a ganar 14-5 a los Cachorros de Chicago.

Desde el montículo , su compatriota el abridor Odrisamer Despaigne lanzó siete episodios y llevó a los Padres de San Diego a un triunfo por blanqueada de 5-0 sobre los Gigantes de San Francisco, que pierden terreno en la carrera por el título de división. Despaigne (4-7) lanzó siete episodios para acreditarse el triunfo, permitió dos imparables, dio una base y retiró a seis enemigos por la vía del ponche.

El novato cubano lanzó 98 bolas, 59 de ellas viajaron a la zona perfecta del strike, contra 24 enemigos y dejó en 3,36 su promedio de efectividad. El abridor dominicano Lisalverto Bonilla trabajó cinco episodios y llevó a los Vigilantes de Texas a su séptimo triunfo seguido al vencer 12-3 a los Angelinos de Los Ángeles, que mantienen liderazgo por la ventaja de campo en las finales.

Bonilla (2-0) lanzó cinco episodios para acreditarse el triunfo al aceptar dos imparables, un jonrón y dos carreras, dio cuatro bases por bolas y retiró a cuatro por la vía del ponche. El dominicano controló a 20 enemigos con 85 lanzamientos, 47 de ellos fueron perfectos y dejó en 4,30 su promedio de efectividad.