La exvicepresidenta de la República y dirigente del Partido Revolucionario Moderno (PRM) Milagros Ortiz Bosch, deploró ayer la muerte del dos veces presidente de Perú, Alan García Pérez, como consecuencia de un suicidio, disparándose en la cabeza, y lamentó que la corrupción esté afectando vidas.
Alan Gabriel Ludwig García Pérez se quitó la vida en su país, previo a ser detenido, relacionado con los escándalos de corrupción de la constructora Odebrecht.
El abogado, político y escritor nacido en Lima, el 23 de mayo de 1949 y fallecido 17 de abril de este año, fue presidente de Perú de 1985 a 1990 y del 2006 a 2011.
Estuvo internado de emergencia en un hospital.
Ortiz Bosch, quien destacó la amistad que tuvo Alan García con el líder del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), doctor José Francisco Peña Gómez (fallecido), y con ella; manifestó el cariño que tuvo el político peruano con la República Dominicana.
“La corrupción está llegando a términos de afectar vidas, países, patrimonios. Es casi una alerta de que si no paramos este proceso de impunidad y este proceso, de mal utilizar los recursos del pueblo, colocándolo en las manos que no les corresponden, el daño nos puede llegar en cualquier momento y por razones éticas”, afirmó Ortiz Bosch.
Opinó que Alan García (presidente del Partido Aprista Peruano (APA) hasta el 14 de abril de este año y senador vitalicio), es una víctima, con unas características muy especiales, ya que fue producto del partido APRA (Alianza Popular Revolucionaria Americana), siendo Víctor Raúl Haya de la Torres, uno de sus fundadores, y uno de los primeros que representaron el marxismo, aportando a la América Primaria la libertad y dijeron no la lucha de clases.
Destacó que este político, logró en un país con muchas diferencias ideológicas, con una derecha, gestionar un movimiento muy espectacular, que envolvió a América Latina y que acabó siendo el gran movimiento del Socialismo de América.
“Alan fue -quizás- escogido desde muy joven y se vislumbró continuador de la obra de Haya de la Torres y fundamentalmente, del organizador del APRA, que era Armando Villanueva del Campo (maestro de los dominicanos que estudiamos en Costa Rica en el año 1961”, narró la política perremeísta.
De Armando Villanueva del Campo resalta en los año 60 tenía entre sus amores de la política “a mi compañero y amigo Alan García”.
Evalúa sus mandatos. Ortiz Bosch indica que el primer gobierno de Alan García fue muy cuestionado y casi de fracaso, ya que pensaba enfrentar todo lo que era el consenso de Washington y el neoliberalismo, de manera muy aislada.
Alan García volvió al poder años después y enfrentó otros caso.
Ortiz Bosch expresó que Odebrecht tuvo una movida internacional sin respeto y donde los dirigentes de Latinoamérica se dieron cuenta de las implicaciones que era trabajar con ella y aceptar ayuda de una empresa que estaría vinculada con grandes constructoras de todo el continente (el caso de 11 países) y sobre todo, en Perú, donde las investigaciones de este caso llegaron tan al fondo.
Dijo que al igual que Alan García, en Perú han sido perseguidos por el caso de Odebrecht, los expresidentes Ollanta Humala, Alejandro Toledo, Pedro Pablo Kuczynski y la política peruana Keiko Fujimori.
Caso Odebrecht
Milagros Ortiz Bosch estimó que al quitarse la vida por estar implicado en el caso de corrupción, puede que Alan García actuara pensado en sus compromisos que traía de políticos leyendas en América, como los grandes creadores de la democracia en América Latina. “Es lamentable, pero es un ejemplo de lo que debemos hacer y tenemos que luchar para que la corrupción no empañe a nuestros mejores hombres”.