BOSTON. Fue un obstáculo que los Medias Rojas superaron en el 2004 y 2007, pero también es algo que no les agrada mucho.

Cuando la Serie Mundial se traslade a San Luis para los Juegos 3, 4 y 5 (si es necesario), Boston pierde al bateador designado.

Eso significa que el dominicano David Ortiz tendrá que buscar su guante y jugar como inicialista, lo que hizo en seis ocasiones durante esta temporada regular. Y también significa que Mike Napoli — quien conectó dos cuadrangulares claves en la Serie de Campeonato de la Liga Americana — estará en la banca en los juegos en que Ortiz sea titular. Y asumiendo que Napoli esté en el lineup para un partido en San Luis, Ortiz no estará en la alineación para aquel compromiso.

Por otra parte, los Cardenales contarán con un bateador adicional en su lineup para los encuentros en el Fenway Park.

«Con David en la primera base, donde jugará cuando estemos en San Luis, aún está por verse cuántos días jugará en esos tres partidos», señaló el manager de los Medias Rojas, John Farrell. «Para nosotros es diferente. Personalmente, cuando vamos a los estadios de la Liga Nacional, pienso que tenemos una gran desventaja, lo opuesto de cuando los equipos de la Liga Nacional vienen a jugar aquí».

Farrell, en grupo exclusivo. John Farrell tiene una rara oportunidad. Si sus Medias Rojas pueden vencer a los Cardenales en la serie Mundial que arranca este miércoles con el Juego 1 en el Fenway Park, se convertirá en apenas el quinto lanzador en la historia de Grandes Ligas en guiar a un equipo al título.

No ha sucedido en 25 años, y consideren que este es el 108vo Clásico de Otoño.

«Hasta que ustedes sacaron el tema, no tenía idea de ello», dijo Farrell previo a la sesión de entrenamiento de los Medias Rojas.