POR JORGE RAMOS
El joven imitador dominicano Oscar Pérez dijo a ¡ALEGRÍA! que para hacer una sátira de una persona no hay que llegar a la ridiculez y la vulgaridad, y por eso se ha ganado el respeto de los artistas y comunicadores. El comediante de “Perdone la hora” manifestó que al único que tuvo que sacar de su repertorio fue a El Zafiro, Carlos Manuel, y lo hizo sin ningún contratiempo.

“Sencillamente al merenguero no le gustó la imitación que hice de su persona y opté por no volver a montarlo, aunque no creo que en ese caso haya llegado a ridiculizarlo”.

Entre sus mejores caracterizaciones están figuras como el cantante Anthony Ríos, de quien dijo le confesó su admiración por la imitación que hace. También imita al animador de televisión Rafael Corporán, al músico Fernando Echavarría, a los merengueros Sergio Vargas, Toño Rosario, Wilfrido Vargas y Fernando Villalona, al dirigente político Rafael Suverbí, al ex presidente Hipólito Mejía y a su amigo y hermano Alfonso Rodríguez, entre otros.

Algunos de los artistas internacionales que Pérez tiene en su repertorio son José José, Julio Iglesias, Raphael de España y Luis Miguel, con el complemento de un show completo con bailarinas, humo, sonido y luces.   

El humorista tiene cinco años consecutivos trabajando en el Festival de la Comedia Dominicana en Miami. También se ha presentado en Washington, Boston y Nueva York.

“Llega un momento en que el público le exige a uno hacer un cambio en la vida. Es por eso que tomé la decisión de abandonar los frentes de las orquestas y dedicarme de lleno a las imitaciones”, expresó.

Oscar Pérez trabajó con Aníbal Bravo, Carlos David, Rubby Pérez y la agrupación con la cual logró mayor proyección fue Tierra Seca, donde comenzó a imitar voces de merengueros y baladistas.

“Fíjate como son las cosas de la vida. Lo que yo estudié en Bellas Artes fue pintura, pero con el arte se nace y a medida que va pasando el tiempo la persona se va dando cuenta de las aptitudes que tiene y las va puliendo sobre la marcha”, expresó el humorista que ha estado dos veces nominado a los premios Casandra.

SU TRAYECTORIA

Como pintor de publicidad, Oscar laboró en varias publicitarias y empresas, hasta iniciarse en radio desde el programa “El vacilón de la mañana”, junto a don Guillermo Henríquez y J. Eduardo Martínez por Fiesta FM, donde permaneció por cuatro años, de 7:00 a 9:00 de la mañana.

Consciente de que su meta eran las imitaciones y el humor, aceptó una invitación de Alfonso Rodríguez para trabajar en el programa “Los electrolocos”, por Telecentro, en el que hacía de teléfono junto a Wilson Díaz, que era la radio.

“Después estuve trabajando un tiempo para “Divertido con Jochy”, hasta que se creó un espacio titulado “Bemberé”. De ahí me marché para Supercanal 33 para realizar durante dos años la hora que había dejado Carlos Alfredo Fatule”.

En Antena Latina logró impactar con sus personajes al lado de Felipe Polanco (Boruga) con el desaparecido programa “El conconsito” y en la serie “Rincón paraíso”, otra producción de Alfonso Rodríguez, donde era uno de los dueños del restaurante “Se vakabar”.

“Tras la experiencia profesional que logro a mi paso por el Canal 7, llego a Color Visión para quedarme en Programarte, la empresa de Roberto Salcedo que produce los espacios “9 x 9 Roberto” y “Perdone la hora”, donde voy a cumplir dos años”, precisó Oscar.

Su meta principal para los próximos dos años es tener su propio programa de televisión, porque considera que tiene los suficientes recursos en caracterizaciones y la capacidad necesaria para hacer una producción atractiva.

SU ESPECIALIDAD

Entre las ventajas que tiene Oscar Pérez para realizar su trabajo de imitaciones en la televisión dominicana está su especialidad en látex para deformarse la cara y emular los rostros de otras personas, desde una abundante cabellera a una brillante calva, pasando por la exageración de rasgos como la boca, los ojos o la nariz.

“Somos pocos los que trabajamos látex en República Dominicana. Es una técnica que me enseñó William Díaz, quien a su vez aprendió en Los Ángeles, California”, indicó.

Señala como otra ventaja de sus imitaciones, la diversidad de personajes que hace, tanto de políticos como artistas y presentadores de televisión.